El relato viral de cómo una joven médica se sale de su cofradía para reanimar a un hombre en Jaén

S. I.

18/04/2022
Actualizado 19/04/2022 a las 11:30h.

Compartir

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Iniciar sesión

La hiperconectividad de nuestra era unida a la fuerza de las redes sociales hacen que hoy en día nos enteremos de historias, sucesos y anédotas que antes sólo era posible presenciándolas en directo o porque alguien que lo hiciese nos las contaba . A colación de esto, la protagonista de nuestro 'visto en redes' de hoy es la responsable de un hilo de Twitter que se ha hecho viral por una anédota vivida en la Semana Santa de Linares, en Jaén.

María (@_MIRypoppins en la red social Twitter) es una jienense que estudia medicina, y que según versa su biografía es una «futura pediatra». La historia que ha relatado en las red social, y que tiene más de 2.000 retweets y casi 17.000 me gustas , parte del calor que se sufre en ocasiones en primavera en nuestra tierra.

El relato de los hechos comienza de la siguiente manera: «Como cada Semana Santa, me encuentro en Linares. Para los que no lo conozcáis, es una ciudad (aunque mis amigos lo llamen pueblo) de Jaén, donde se toman las mejores tapas del mundo, huele a olivo todo el año, y a partir del 15 de abril hay 30ºC. Toda mi familia es de aquí. Desde hace unos 14 años soy hermana de la Cofradía del Cristo de la Expiración y Nuestra Señora de la Esperanza (en mi opinión la más bonita). Hacen un encuentro entre el Cristo y la Esperanza, los horquilleros suben corriendo a la virgen, y el Cristo se alza con las manos».

«Después de cuatro años sin estación de penitencia, (2 por la pandemia y otros 2 por lluvia), PUDIMOS SALIR EN PROCESIÓN. El recorrido son unas 8 horas (desde las tres de la tarde, a las dos en la iglesia, hasta las 10:30-11 horas de la noche). A las tres de la tarde en Linares ayer empezaba a evaporarse el agua de las fuentes (como buena medio-linarense soy mu esagerá, pero es que debajo del terciopelo hace calor). Llevábamos 1 hora procesionando, pasamos por una calle al sol, y vi a un señor sentado en el suelo)».

«El señor estaba más blanco que la túnica del Resucitado y a su alrededor había un círculo de personas DE PIE mirándole de reojo y una revista medio doblada que le daba un aire relativo. Todo esto AL SOL EN LINARES . Entré en LUCHA INTERNA. Porque se supone que procesionando no se debe saber quién eres. Vas haciendo penitencia, y por ello esto no es una fiesta de disfraces y de pronto puedo hacer: SORPRESA. Pero sigo siendo médico, y tengo el deber de intervenir aunque sea “una tontería”, ¿no?».

«Total que el señor ya estaba poniéndose blanco morado verde y de los colores de todas las procesiones de Linares y dije ya. Me acerqué a la capataz, le expliqué en tres segundos y le di mi cirio. Me salí de la procesión con un SOY MÉDICO (por fin). La gente flipando . Con la túnica por el suelo la capa volando y el gorro aún puesto dándole a todo ser humano alrededor, dije de tumbarlo y subirle las piernas y empecé a hablar con él».

«Me miraba en plan “debo estar delirando porque un penitente me está haciendo una anamnesis”. En cuestión de tres minutos el señor estaba como nuevo. Justo cuando la procesión se ponía en marcha. Me despedí de él y me dispuse a seguir con otras seis horas de procesión. Se puso de pie y siguió viendo la procesión . Y aquí no ha pasado "ná". Lo mejor es que el señor se levantó diciendo: "¡Qué raro! Ya estoy bien". ¿CÓMO QUE QUÉ RARO SEÑOR? LE HE DICHO LO QUE HACER».

El hilo ha tenido gran cantidad de interacciones y respuestas aplaudiendo el gesto de esta joven médica y engrandeciendo la Semana Santa de Linares.

Ver comentarios (0)

Reportar un error