Condena de cuatro años para el conductor ebrio que arrolló mortalmente a una joven durante la feria

El conductor ebrio que provocó el accidente en el que el murió una joven en 2018 en Jaén ha sido condenado a 4 años y 2 meses de prisión por la Audiencia Provincial. El tribunal ha dictado sentencia conforme al acuerdo alcanzado entre la defensa y el fiscal, que en principio solicitaba casi el doble de pena para el acusado por homicidio imprudente, lesiones, omisión del deber de socorro y delito contra la seguridad vial .

Los hechos sucedieron en el marco de la feria de San Lucas. En concreto, el 14 de octubre de 2018. A las 22 horas de ese día el acusado, de 42 años, circulaba por la avenida de Madrid en sentido ascendente, cuando en un cruce invadió los 2 carriles descendentes. Por uno de ellos circulaba una motocicleta a la que arrolló .

El conductor de la motocicleta resultó herido y su acompañante, una chica de 20 años, impactó contra la calzada a varios metros del lugar donde se produjo el accidente al salir despedida. El golpe le produjo un traumatismo craneoencefálico, por lo que fue ingresada en la unidad de cuidados intensivos del hospital Neurotraumatológico, donde durante 2 días un equipo médico intentó infructuosamente salvarle la vida .

Al colisionar su coche con la motocicleta el inculpado detuvo su vehículo y observó a la víctima en el suelo, pero se dio a la fuga, a pesar de que los testigos del accidente le conminaban a que detuviera su coche y auxiliara a los heridos. Así lo relató el atestado de la Policía Local y así describió los hechos el auto de la juez que ha instruido la causa contra el conductor, quien fue localizado poco después de huir por una patrulla de la Policía Local. En las pruebas de alcoholemia dio positivo. En concreto su tasa de alcohol en sangre duplicaba la permitida .

El acuerdo alcanzado ha evitado que el responsable del homicidio imprudente sea juzgado por un jurado popular y valida el relato de los hechos del ministerio público, incompatibles con lo expuesto en la primera declaración del acusado, quien expuso que creía haber cochado contra un bordillo y negó que se diera a la fuga. En ese momento la juez no le creyó, por lo que ordenó su ingreso en la cárcel , donde estuvo desde octubre de 2018 a octubre de 2019.