Abierto en Jaén el proceso del martirio de 130 fieles asesinados en la Guerra Civil

El administrador apostólico de la diócesis de Jaén, Ramón del Hoyo López , obispo hasta el pasado 9 de abril, ha abierto el proceso del martirio de 130 fieles diocesanos asesinados durante la Guerra Civil. El postulador de la causa es el sacerdote Rafael Higueras .

Entre los fieles diocesanos incluidos en el proceso de beatificación bajo el nombre de proceso del martirio de Manuel Izquierdo Izquierdo y 129 compañeros, se encuentran 109 sacerdotes, una religiosa de clausura, un matrimonio, 17 varones seglares y un sacristán con discapacidad intelectual. Todos ellos, asesinados durante la contienda en Jaén y su provincia, en Constantina (Sevilla), Granada y Vallecas (Madrid).

Entre los fieles a los que se pretenden beatificar, hay 4 parejas de hermanos, 2 de ellos sacerdotes y un presbítero de 26 años recién ordenado. También un cura que pidió al carcelero sustituir a un hombre, padre de familia, que iba a ser ejecutado . Son 130 historias de fe viva, según destaca la diócesis.

En el acto de apertura del proceso, Ramón del Hoyo ha elogiado a estas personas que, a causa de su fe, perdieron la vida. Ha pedido, asimismo, que el proceso suponga la reconciliación plena desde el perdón dado y recibido . Y ha destacado que la iniciativa significa, en definitiva, "el triunfo de la voluntad de Dios Padre de las misericordias, del perdón y de la paz, en este año jubilar extraordinario de la misericordia".

Del Hoyo ha destacado que los 130 bautizados murieron por odio a la fe , no por otras razones. "No quisieron renegar de bien tan grande y murieron confesando a Cristo. Eran personas creyentes en las que la fuerza de Dios actuó en aquellos momentos de forma especial, como en la muerte del diácono San Esteban. Verían también de alguna forma «los cielos abiertos»".

El proceso de beatificación puede durar alrededor de 6 años y está precedido por una amplia labor, ya que se han recogido 600 testimonios , así como pruebas documentales e históricas. Una vez iniciado el proceso, en Jaén se llevará a cabo la instrucción del mismo, cuyas conclusiones se remitirán a El Vaticano.