antiguo egipto

Investigadores de Jaén descubren una tumba con diez momias de cocodrilo en un yacimiento egipcio

El descubrimiento se realizó en la necrópolis de Qubbet el-Hawa, donde la Universidad de Jaén encabeza una misión arqueológica.

El hallazgo ha sido investigado por arqueozoólogos belgas, que acaban de publicar un estudio

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Imagen de uno de los cocodrilos hallados en la tumba egipcia patricia mora

Daniel Illana

JAÉN

Hay quien elige como atuendo para irse al otro barrio su mejor traje. Los hay clásicos que prefieren un hábito o saya de tal o cual congregación religiosa, pero en extravagancia nadie gana a los antiguos egipcios. Y la Universidad de Jaén ha vuelto a dar fe de ello. Las excavaciones de la necrópolis de Qubbet el-Hawa, en el Valle de las Reinas, no dejan de dar sorpresas en cuanto a los hábitos inhumatorios de la época de los faraones.

En muchas ocasiones, eso sí, esas sorpresas deben pasar por un exhaustivo estudio antes de publicarse, como es el caso. Pues los diez cocodrilos hallados en una tumba intacta en estas excavaciones fueron descubiertos en 2019, pero uno de los mejores laboratorios de arqueozoólogía del mundo, el del Real Instituto Belga de Ciencias Naturales de Bruselas, han tenido que estudiar los ejemplares a fondo antes de dar a conocer los resultados.

Como explica el profesor de Arqueología de la Universidad de Jaén y uno de los mayores expertos del antiguo Egipto en España, Alejandro Jiménez, se trata de una «rareza». «No es un descubrimiento único, pero sí inusual, de hecho hacía décadas que no se hallaba algo parecido», explica. «Eso sí, ahora contamos con métodos modernos de análisis que nos ayudan a un mejor y más profundo estudio».

De eso se ha encargado el equipo de la investigadora belga Bea De Cupere. «Se conocen más de 20 lugares de enterramiento con momias de cocodrilos en Egipto, pero encontrar 10 momias de cocodrilos bien conservadas juntas en una tumba intacta es extraordinario», asegura.

Identificicación de los restos óseos de uno de los cocodrilos hallados PATRICIA MORA

Los arqueólogos de Qubbet el-Hawa encontraron rastros de lino, hojas de palma y cuerdas, asociados con algunos de los cocodrilos, lo que indica que alguna vez estuvieron envueltos. Lamentablemente, las vendas fueron devoradas por los insectos en la antigüedad. Llama la atención que los cocodrilos no estuvieran cubiertos con grandes cantidades de resina o betún, como era habitual en épocas más modernas. Este hecho, a parte de indicar que son más antiguos que la mayoría de las momias de cocodrilos que se tiene, permitió a los investigadores medir y estudiar estos especímenes a fondo.

Según explica Alejandro Jiménez, los investigadores belgas concluyen que para llevar a cabo el proceso de momificación, en primer lugar los animales fueron atrapados y sacrificados dejándolos morir por inanición. Seguidamente, fueron introducidos en agujeros en la arena que se encargarían de secar la carne y asegurar su conservación.

Varias especies

Uno de los hechos más llamativos es que se han encontrado cocodrilos de dos especies diferentes, cocodrilos del Nilo y el cocodrilos de África Occidental, está última no está ya presente en esa zona. Los saurópsidos no fueron abiertos tras su muerte, como demuestra el hecho de que en ellos se han encontrado los llamados «gastrolitos«, piedras que ingieren como contrapeso para mejorar su flotabilidad. Los ejemplares oscilan entre apenas un metro y medio, y más de tres.

Según las hipótesis de los investigadores, Es muy posible que estos cocodrilos pudieran haber sido utilizados de intermediarios entre los humanos y el dios Sobek, que era el dios del agua y la fertilidad, a menudo representado con una cabeza de cocodrilo. Esta divinidad tuvo mucha importancia en la cercana Kom Ombo, a solo 50 kilómetros de Asuán. De hecho, Kom Ombo fue un importante centro de culto a los cocodrilos, pero no se tenía noticia de que sucediera lo mismo en Asuán, aunque ahora las investigaciones pueden virar de nuevo.

Este próximo mes de marzo está previsto que Alejandro Jiménez y su equipo vuelvan a Asuan a continuar con las excavaciones, investigaciones que nos presentan hallazgos sorprendentes de tanto en tanto y que, en ocasiones, obligan a un replanteamiento de todo lo que se conocía sobre los orígenes de la civilización hasta la fecha.

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