Le ofrece sexo en un bar y le desvalija su casa tras poner «burundanga» en su bebida

La Policía Nacional ha detenido en Linares a una mujer que drogó y robó a un hombre con el que había contactado en un establecimiento hostelero ofreciéndole favores sexuales. La víctima había entrado en el local para tomar unas copas y fue allí donde conoció a la detenida: una mujer joven y de cierto atractivo que no dudó en acercarse para entablar una animada conversación.

Según detalló la Policía la mujer aprovechando un descuido, del hombre para poner en la bebida «una sustancia estupefaciente» para después proponerle mantener relaciones sexuales en una pensión, a lo que la víctima accedió pero prefiriendo ir a su domicilio.

Posteriormente, pasadas unas seis horas del encuentro, se despertó tirado en el suelo sin acordarse de nada, tan solo con el leve recuerdo de que había llegado a casa acompañado por una mujer. Para darse cuenta segundos más tarde que le habían robado todo el dinero que llevaba en la cartera, un teléfono móvil, el reloj de pulsera, un equipo informático y una guitarra eléctrica. Una vez recuperado de la sorpresa y del sopor producido por la droga regresó al bar con el fin de volver a encontrar a la mujer, comentando a una empleada lo que le había sucedido. Al parecer, no había sido la única víctima según le manifestó la camarera ya que anteriormente, había entrado en el local otro hombre manifestando que había sido víctima de un robo sin recordar nada.

El hombre acudió a la Policía Nacional para denunciar los hechos y los agentes iniciaron las pesquisas que les levaron hasta un hombre que había tenido relaciones esporádicas con la mujer que buscaban y a la que dio alojamiento en su casa. Casa que abandonó en la madrugada en la que ocurrió el suceso dejando la guitarra eléctrica que había robado. Una vez identificada se estableció el «modus  operandi» de la mujer que  seleccionaba a sus víctimas, siempre hombres de edad, preferentemente casados con el fin de evitar que la denunciaran .

Una vez escogida la víctima, la presunta autora entablaba conversación ofreciendo favores sexuales, momento en el que vertía en la copa una sustancia estupefaciente de última generación denominada «burundanga», conocida por sus efectos y que consigue anular la voluntad de quien la consume generando una desorientación temporal, lo cual conlleva una pérdida de memoria, por lo que las víctimas no recuerdan lo ocurrido durante el periodo que discurre bajo sus efectos.  Iniciada la búsqueda de la presunta autora, los agentes consiguieron localizarla procediendo a su detención.