Fuenteheridos, del agua al bosque encantado
Dejamos atrás un camino empedrado para adentrarnos en el corazón del Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche a través de un sendero que despierta los sentidos más allá de la vista. Una pareja de caminantes da comer a un caballo que acaba de asomarse a saludar desde una cuadra que encontramos al paso, lindando con una finca en la que una marrana recién parida (pata negra, por supuesto, Denominación de Origen Jamón de Huelva ) amamanta a varios lechones.
Nuestros pasos se encaminan en dirección a Fuenteheridos y el correr de un río alcanza nuestros oídos para adelantarnos que la historia del pueblo no puede contarse sin el agua y anunciarnos que estamos en la ribera de Jabugo . En un abrir y cerrar de ojos, nos encontramos en un bosque que parece salido de un cuento, en una arboleda encantada…nos rodean castaños serranos y grandes ejemplares de alcornoques, quejigos y encinas. También hay brezos, chopos y helechos donde la vista alcanza y los pulmones sienten.
Este sendero que nos lleva a un minúsculo pueblo (678 habitantes según el padrón oficial) bendecido por la naturaleza, la calma y la gastronomía, se integra en una cadena de caminos que discurre y envuelve toda la Sierra onubense para ofrecernos momentos inigualables.
Al final del trayecto (o principio, según la opción), la Plaza El Coso, en el casco urbano, declarado Conjunto Histórico-artístico a comienzos de la década de los 80 y posteriormente Bien de Interés Cultural (BIC) . Desde aquí parten, en forma radial, todos los recorridos posibles, caminos reales algunos de ellos que conectaban con los pueblos del entorno. De hecho, Fuenteheridos se ubica justo en el cruce de dos de estos caminos, el de Sevilla-Portugal y el de Fregenal-Zalamea La Real.
Bajo la plaza, el manantial de Fuenteheridos, uno de los más abundantes del Sur de España y cabecera del Múrtigas, del que se abastece la población y se utiliza para el riego de huertas que se dispersan alrededor del río.
El manantial brota por la popular Fuente de los Doce Caños, en el Paseo de Arias Montano junto a la plaza central, así como en la zona de la Fuente de los Turnos de Riego , desde donde pasa a la lieva - regajo por el que discurre el agua de riego a las que se le atribuye un origen medieval- que la lleva a las zonas de regadío.
La construcción de la Fuente de los Doce Caños (1903) fue una cuestión de sanidad ya que hasta entonces, el lago que nacía del manantial también era utilizado por animales.
Estas construcciones vinculadas al agua forman parte de un itinerario que lleva, desde los Doce Caños hasta el Paseo de los Poetas . «Camino de desafíos, de trabajo de parranda. Caminito de la lieva , que va acompañando el agua' reza uno de los azulejos que se suceden en el trayecto, ofreciendo vocablos propios de esta comarca onubense y su significado, que forman parte del Museo del Léxico serrano que recopila palabras antiguas.
Relucientes casas blancas que se levantan en casco urbano conservado, pequeñas calles con rincones especiales hace de Fuenteheridos un lugar para vivirse, con el atractivo de una potente gastronomía en la que el protagonista principal es el cerdo ibérico y sus derivados (jamones y chacinas de calidad superior), sin olvidar los productos que llegan de sus bosques, como las setas, las castañas o la miel.
Dónde dormir en Fuenteheridos. El único camping de la comarca, El Madroñal, se encuentra en esta localidad que, además de zona de acampada y autocaravanas, dispone de casas rurales y bungalows . Otra opción es el Hotel Rural Villa Onuba, que cuenta con un jardín botánico.
Dónde comer. Restaurante Biarritz, Mesón El Barrio, Mesón La Posá. Bares de comida: La Garrocha y el Rincón de Rafa.
Donde divertirse . Numerosas opciones de senderismo y ocio al aire libre. Información en el Ayuntamiento.
