Sucesos
Calañas, el pueblo de Huelva que vive «con miedo» a dos vecinos con un amplio historial delictivo
El Ayuntamiento recurre al juzgado para que intervenga ante «la situación límite» que vive el municipio
En Calañas , un pequeño pueblo del Andévalo onubense cuya población ronda los 2.800 habitantes, dos miembros de una misma familia que arrastran un amplio historial delictivo tienen atemorizado a los vecinos por los constantes conflictos, peleas y amenazas que vienen protagonizando en las calles e incluso en el centro de salud en los últimos meses.
«Estamos en una situación límite y se puede ir de las manos, puede ir a mayores» se lamenta el alcalde, Mario Peña , después de tener que recurrir a los juzgados para que intervengan, en una llamada de socorro porque «en Calañas se vive con miedo por estas dos personas, que no pueden convivir con nadie».
El último episodio violento se vivió en la tarde del pasado lunes en plena calle, en el Paseo del Real , en el entorno del cuartel de la Guardia Civil , informa Huelvahoy, cuando estos dos hermanos –uno de ellos salió de cumplir condena hace pocos meses- se enfrentaron con otra familia en una reyerta en la que se utilizaron armas blancas y palos.
La pelea continuó por la noche y finalmente hubo algunos detenidos, decretando la autoridad judicial el ingreso en prisión de uno de los hermanos implicados en la jornada de ayer, aunque no se ha podido confirmar si se debe a este último incidente o responde a delitos que hubiera podido cometer anteriormente.
La de esta semana ha sido la última reyerta o episodio violento que, según ha denunciado el regidor a ABC, se vienen registrando con frecuencia en el pueblo y, en el centro de salud , casi a diario, con «insultos y amenazas» al personal que han derivado a una situación en la que no se les atiende si no es en presencia de la Guardia Civil .
Peña ha confirmado que mañana presentará un nuevo escrito ante los juzgados de Valverde del Camino ya que la situación –repite- es de «miedo» y «los vecinos ni siquiera denuncian algunos casos por temor». «No deseo que estén en prisión pero no se puede convivir con ellos».