Ayamonte, en la frontera natural del Guadiana
El pueblo onubense despide y da la bienvenida a España en el Sur, junto a la raya de agua que la separa y une a Portugal
Ayamonte despide y da la bienvenida a España en el Sur , junto a la raya de agua que la separa y une a Portugal. Siempre el Guadiana, atracción de civilizaciones y pueblos que, a lo largo de la historia, se han asentado en su ribera y han dejado huella desde sus principios.
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Así lo narran los restos arqueológicos que en las últimas décadas han ido viendo la luz. El último yacimiento descubierto habla de los orígenes y retrotrae hasta la prehistoria, a la época megalítica, un campo de menhires, situado entre los mayores de Europa, que llegan a alinearse con el sol aquí donde el astro se pierde en el horizonte.
Referencias de pueblos llegados del Mediterráneo , de vínculos con Tartessos, con griegos y romanos, de periodos de dominación musulmana. Sin embargo, los historiadores Benjamín Cabaco y Elisabet García apuntan al origen fenicio de la ciudad en base a un asentamiento protohistórico datado entre los siglos VIII-VII a.C. que se ubica a lo largo del barrio de La Villa.
Ayamonte, entrada estratégica
Ayamonte ha atraído culturas por su entrada estratégica al continente, con puerto de mar y con dominio del río-frontera desde la parte más alta y antigua del municipio. Aquí, en la zona donde la historia ubica el primer poblado, se localiza el Parador de Ayamonte, una edificación que se levantó en los terrenos ocupados por el Castillo de Ayamonte (una fortaleza desaparecida) que tuvo que ser reconstruida tras el terremoto de Lisboa de 1755.
A la villa fronteriza, a la que el rey Felipe IV le concedió en el siglo XVII (1664) el título de Muy Noble y Leal Ciudad a Ayamonte, le han cantado María Dolores Pradera, Joaquín Sabina, Enrique Urquijo y Dani Martín, poniendo voz a la composición del granadino Carlos Cano que narra el amor de María la Portuguesa y un contrabandista de la orilla española del río. La historia de un amor roto por un crimen, el del amante a manos de la guardia costera portuguesa, sorprendido cuando cruzaba con marisco de estraperlo.
Siempre el Guadiana. No había puentes entonces, el río solo podía cruzarse en barco. A una orilla y otra del río, los coches se amontonaban en filas interminables para coger la barcaza que unía Ayamonte y Vila Real de Santo Antonio mientras en los cassetes recordaba la historia de María.
La escena en el puerto ayamontino fue así hasta 1991 , cuando después de varias décadas de negociaciones, desacuerdos y acercamientos (finalmente), se inauguró el Puente Internacional sobre el Guadiana, haciendo realidad la idea de los gobiernos de España y Portugal (y la aspiración de vecinos y comerciantes de ambos lados) de comunicar ambos países por carretera, con un puente (de unos 700 metros) en el tramo último de la desembocadura de la frontera natural entre ambos.
Recorrer las calles de Ayamonte, con casas puro blanco y suelos es recorrer parte de su historia, hasta llegar, desde el Puerto a la conocida Plaza de la Laguna, en la que encontramos una representación en azulejo del cuadro que Sorolla le dedicó al municipio. «Ayamonte, cuadro del inmortal Sorolla pintado a esta ciudad en 1919, cuyo original se conserva en el Museo Hispánico de Nueva York».
E l pintor paseó en sus cuadros desde La Laguna al puerto pesquero (La pesca del atún) y su espíritu parece llenar los rincones del pueblo, cuna de artistas, especialmente en verano, donde decenas de artistas vinculados al pueblo sacan sus obras a la calle.
En Punta del Moral , un barrio de pescadores que ha logrado mantener su esencia, sentarse a la mesa es un placer al paladar para comer el pescado más fresco, lejos de etiquetas y boato.
Mientras, en el frente litoral, se levanta un de los más importante núcleos turístico de Huelva (Isla Canela) de playas infinitas y atardeceres díficiles de encontrar salvo en este punto del poniente.
Ocio en Ayamonte
Dónde alojarse . Las playas de Isla Canela y Punta del Moral están repletas de resort de calidad. Una opción diferente es el Parador de Ayamonte, con vistas al río Guadiana y a su orilla lusa.
Dónde comer. En Punta del Moral hay numerosos restaurantes de calidad, con pescado fresco y arroces con marisco, dignos de estrellas. En el pueblo, la Pamela, Casa Luciano, Casa Miguel Ángel.
Dónde Divertirse. A lo largo de toda la playa de Isla Canela, puedes encontrar chillout, música en vivo y mercadillos nocturnos.
