Alertan de «contagios en cadena» en un hospital de Huelva, con 15 sanitarios infectados por coronavirus

M. R. Font

26/03/2020
Actualizado a las 15:01h.

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Una semana después de que un sanitario del Hospital de Riotinto desvelara que no se le habían hecho las pruebas del Covid-19 pese a presentar síntomas en los días previos a entrar de turno a trabajar, el sindicato CSIF ha denunciado «posibles negligencias », ya que al personal de este centro «se le obliga a trabajar habiendo estado en contacto con pacientes positivos en coronavirus sin hacerles los test y sin medidas de protección adecuadas».

Según la central, alrededor de la mitad de los sanitarios que engrosan ya las listas oficiales de positivos hasta ahora (alrededor de una treintena), la mitad pertenecen al hospital de Riotinto, un total de 15 profesionales hasta el momento están infectados por el virus. «El riesgo es altísimo y l a exposición al contagio hace presagiar que van a salir muchos más casos positivos durante los próximos días», ha asegurado el responsable de Sanidad de CSIF en Huelva, César Cercadillo .

La información procede de los mismos profesionales, ha indicado, ya que desde la Administración no se facilita ninguna información. «La situación es de caos y miedo ».

Según el sindicato, esta cadena de contagios es consecuencia de la falta de medidas preventivas y de equipos de protección y, de hecho, ha confirmado que los profesionales que han estado en contacto con positivos en coronavirus continúan trabajando sin haberles realizado los test de detección y en algunos casos, los trabajadores fueron enviados a sus casas para pasar la cuarentena pero, ante la falta de personal, «les obligan a volver a ir al hospital sin verificar si tienen el virus ».

«La norma que están imponiendo es que si no tienen síntomas pueden ir a trabajar y no se les hacen los test de Covid-19 aunque hayan estado en contacto con personas infectadas; por tanto vuelven al centro hospitalario sin saber si son portadores del coronavirus, lo que es una gravedad extrema y están exponiendo a los trabajadores a una carga viral elevadísima , algo que puede agravar la enfermedad aun en personas jóvenes», ha lamentado Cercadillo.

Por otro lado, la central ha manifestado que en relación con los equipos individuales de protección (EPIs), a los profesionales «se les está obligando a reutilizar» las mascarillas FPP2, que sólo tienen eficacia durante ocho horas y no deben humedecerse ni mojarse. La directriz que se ha marcado desde el hospital es que cuando acaben el ciclo de dos días de utilización de estas mascarillas «se rocíen con alcohol y las metan en una bolsa estéril con el nombre de cada trabajador para volver a utilizarlas al día siguiente».

En un principio, estas mascarillas se utilizaban durante todo el turno de trabajo y se desechaban al finalizar la jornada o si los profesionales habían estado en contacto directo con algún paciente positivo en coronavirus. Sin embargo, desde hace dos días «tienen que servir para cada trabajador durante el tiempo que sea necesario, así que las guardan dentro de un sobre en un armario para volver a utilizarse.

Una situación similar – ha agregado- ocurre con las batas , que no se pueden cambiar durante todo el turno de trabajo, son de manga corta y material permeable y los cuellos quedan desprotegidos.

Ante «estas negligencias y la ausencia total de medidas de protección eficaces, no se ha dado por escrito ningún tipo de protocolo a la plantilla». Según la central, se están adaptando las normas de funcionamiento al material que tienen, sin importar si realmente sirven para prevenir los contagios y evitar la propagación del Covid-19».

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