SUCESOS
Cae una red rusa de explotación sexual de mujeres en Granada
La Policía Nacional ha detenido a siete integrantes de la red, entre ellos el cabecilla, y ha solicitado orden europea de detención para otros 3 residentes en Rusia
La Policía Nacional ha desarticulado una red rusa de captación de mujeres para su explotación sexual en clubes de alterne de Granada. Las chicas eran captadas en la ciudad de Volgogrado, en Rusia. En la operación se ha detenido a siete personas, entre ellos el cabecilla, que ya había sido detenido en nuestro país en el año 2006 por hechos similares.
Además de los detenidos en esta operación policial, cuatro de nacionalidad rusa y tres españoles, la Policía Nacional ha solicitado órdenes de detención europea para otros tres miembros, residentes en Rusia.
La organización estaba perfectamente estructurada y contaba para la captación de las mujeres con miembros afincados en Rusia donde buscaban jóvenes dispuestas a salir de la situación de pobreza en la que vivían , a las que engañaban prometiéndolas trabajar en España en la hostelería.
La realidad era bien distinta y a su llegada a Granada, procedentes en autobús desde los aeropuertos de Madrid o Barcelona, vivían en condiciones infrahumanas, hacinadas junto con otras compatriotas, y comenzaban a ser prostituidas.
La investigación comenzó cuando se detectó un aumento en el número de mujeres llegadas desde Rusia para ejercer la prostitución en Granada, lo que llevó a los agentes de la Policía Nacional a intensificar aún más los controles en las zonas habituales.
Paralelamente una mujer, también de nacionalidad rusa, denunciaba en la Comisaría de Vigo ser víctima de una red que la trajo a España para trabajar como camarera y, una vez aquí, la había obligado a ejercer la prostitución en dos clubes de alterne de Granada.
La Policía Nacional también ha registrado estos clubes de alterne y tres domicilios que la organización utilizaba en los que se han intervenido pasaportes falsificados, cuadrantes diarios de servicios sexuales y copas, 20.000 euros en efectivo y varios móviles.
Para tratar de alargar la situación de las mujeres en el territorio nacional, el grupo contaba con la colaboración de una red de falsificadores que se encargaba de de estampar sellos de entrada y salida en los documentos de las víctimas para garantizar su situación de estancia en España.
La operación ha sido llevada a cabo por la Brigada Central contra la trata de seres humanos de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras y las unidades contra las redes de inmigración y falsedades documentales de Granada y Vigo.