La nomofobia, el miedo irracional a no disponer del móvil, una amenaza a la orden del día en los universitarios

Un estudio de la Universidad de Granada realizado en 800 estudiantes demuestra niveles moderados de este fenómeno en auge que puede acarrear falta de sueño, desórdenes alimenticios y un bajo rendimiento académico

La nomofobia está cada vez más extendida entre los jóvenes Europa Press

Álvaro Holgado

El teléfono móvil es a día de hoy casi una extremidad más en el cuerpo de cualquier ser humano. Lo que podría parecer una hipérbole va ganando peso poco a poco, sobre todo en las nuevas generaciones, nativos digitales , quienes no comprenden el mundo sin el apoyo de la pantalla.

La nomofobia (non-mobile-phone-phobia) , es decir, el miedo irracional a no disponer del smartphone, está a la orden del día. Según un estudio de la Universidad de Granada realizado en 800 de sus estudiantes, el fenómeno presenta «niveles moderados» aunque en determinadas situaciones sea especialmente grave.

Los agravantes no son otros que la imposibilidad de establecer una comunicación instantánea y bidireccional con familiares o amigos; así como el hecho de no poder consultar de forma inmediata si tienen nuevas notificaciones. Ya sea por falta de cobertura, conexión de datos u otros factores que no le permiten la instantaneidad propia del medio.

Esta adición puede llegar a tener como resultado más notable los desórdenes del sueño . Tal y como explica el estudio realizado en la universidad granadina, un grupo considerable de la muestra que participó en él afirmó tener un peor descanso debido al uso excesivo de sus teléfonos móviles. Aunque la investigación no ve correlación de ello con la nomofobia , sí que parece haber estrecha causalidad entre el tiempo que pasamos delante de la pantalla y la posibilidad de que el fenómeno ocurra en el corto plazo.

De hecho, los niveles de nomofobia están significativamente más relacionados en aquellos que afirman no tener problemas en su tiempo de descanso debido al uso del móvil, lo que da pistas de los hábitos creados por su uso. Es decir, mientras la disposición del móvil esté cerca y garantizada, el sueño no sufre.

Se trata de una pescadilla que se muerde la cola: cuanto más tiempo dedique el estudiante a usar el s martphone , el nivel de nomofobia en determinadas situaciones a priori normales, será mayor. No poder conectarse a una señal Wi-Fi , no saber qué hacer cuando no se tiene el aparato cerca, agobiarse por no revisar las notificaciones o incluso ponerse nervioso ya con el móvil en la mano por no recibirlas , son escenarios solo posibles por el uso continuado del móv i l .

El rendimiento académico , el objeto principal de estudio para los investigadores de la UGR, puede ser uno de los principales afectados por la presencia de la nomofobia. Entre las consecuencias, cuya investigación está en auge, se encuentran también los desórdenes alimenticios, el menor desempeño profesional debido a la facilidad para distraerse y una mayor dificultad en las relaciones sociales .

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación