Las contrataciones fantasma en el cementerio de Granada, a un paso del juicio

La investigación de las contrataciones fantasma en el cementerio de Granada ha concluido. El Juzgado de Instrucción 9 de la capital ha acordado que el llamado «caso Emucesa» siga su curso como procedimiento contra ocho personas. Entre ellas, el exconcejal popular Eduardo Moral y la edil del PP en funciones María Francés , además del gerente de la empresa externalizada que gestiona el camposanto y los cinco trabajadores que presuntamente cobraron pese a no tener actividad alguna.

El juez instructor considera que «existen indicios sucifientes» para sospechar que los investigados incurrieron en uno o varios delitos , tales como prevaricación administrativa de carácter continuado, dejación intencionada de promover la persecución de los delitos de que tenga noticia o de sus responsables, malversación de caudales públicos y fraude de prestaciones de la Seguridad Social.

Las partes tienen un plazo de diez días para pronunciarse sobre este auto, del que ha informado Europa Press, y solicitar la apertura del juicio oral con un escrito de acusación o el sobreseimiento de la causa. Algunos de los investigados ya solicitaron sin éxito en la Audiencia el archivo del caso, que surgió a raíz de una denuncia ante la Fiscalía por parte del partido Vamos Granada , el cual no ha obtenido representación en las últimas elecciones.

Informes técnicos concluyeron que, entre 2003 y 2012, cuando la empresa era cien por cien pública, se beneficiaron de estos contratos seis personas con un coste de mas de 300.000 euros , pese a que únicamente consta que una de ellas asistiera a la empresa y realizara algunos trabajos. Los presuntos beneficiarios eran afiliados del Partido Popular y fueron contratados supuestamente por los consejeros delegados de Emucesa, Eduardo Moral y María Francés.

Ambos negaron en su día ante el juzgado irregularidades en las contrataciones, incidiendo en que los beneficiarios sí realizaron la labor para la que fueron empleadas y que nunca hubo «reparos» ni desde el Consejo de Administración, ni de la Gerencia ni en las auditorías externas que se realizaron en aquellos años.