Coronavirus en Córdoba
Los vecinos de Palma del Río señalan a la hostelería como el principal foco de contagio
El argumento de la calle coincide en una excesiva relajación que ahora pagarán con un nuevo confinamiento
Cribado en Palma del Río | Comienzan los test masivos en la localidad, que estudia más medidas antiCovid
En Palma del Río se realizará hoy un cribado masivo del que saldrán datos concluyentes sobre el estado de salud a nivel general de sus vecinos. Los últimos días han supuesto un significativo aumento de los positivos por Coronavirus , por lo que los vecinos se muestran entre indignados por las actuaciones de sus paisanos y asustados por las consecuencias, sobre todo económicas que pueda traer un nuevo confinamiento.
Los últimos datos que se desprenden de los informes oficiales de la consejería de salud detectan 95 casos en los últimos catorce días de los qu e 31 han llegado en la última semana . El aumento desproporcionado ha hecho tomar medidas, como la tomar muestras de forma masiva aunque los vecinos claman «mano dura» en determinadas situaciones como la hostelería y la restauración. Coinciden en que ahí ha estado el principal fallo y que por tanto «nos confinarán otra vez».
Manuel Silva hacía cola a las puertas de una sucursal bancaria. Este vecino señaló a ABC que « en general aquí se le ha tenido poco respeto al virus , se han celebrado muchas fiestas y solo hace falta dar un paseo el sábado por la tarde para ver cómo están los bares ». De estos lugares señala que «ahí no ves a nadie con mascarilla y sí están juntos; es absurdo tomar medidas estrictas en otros sitios y no ahí, que es donde nadie cumple las normas».
En ese discurso coincidía una empleada de limpieza que barre las calles y que ha preferido mantener su nombre en el anonimato: «Si nos tienen que volver a encerrar por un bien general vale, pero el problema está en los bares . Ahí no se mantiene la distancia de seguridad ni se usa mascarilla ni nada. Los bares están siempre llenos y es normal que pase esto que está pasando. Yo personalmente mantendría mi trabajo, pero otros están incumpliendo normas por ganar un poco más sin darse cuenta que van a perder a partir de ahora otra vez».
El ambiente de las calles era el habitual. La gran mayoría de ciudadanos hacían uso de la mascarilla. Ahí, otra vecina palmeña se quejó de las distintas varas de medir y también acusó a la juventud y la restauración como foco del problema: « Cierran los parques infantiles para que los niños pequeños jueguen, pero las terrazas de los bares se ven hasta la bola . Por ahí pasan las autoridades y agachan la cabeza y ahora nos encontramos esto. Ahora dirán de cerrar y lo volverán a acusar las tiendas más pequeñas pero seguiremos llenando el Mercadona donde estaremos todos juntos».
José Carmona, un trabajador de la construcción restó, en cambio, importancia a los bares: «Yo por ejemplo he celebrado la comunión de mi hijo y nos hemos juntado solo quince personas y no ha pasado nada. Aquí en Palma hay futbolistas, cantantes y gente famosa que lo ha cogido y no pasa nada. Al final aquí estamos como en Almodóvar y como en todos los pueblos de alrededor ; nos ha tocado y ya está».
Su compañero en la obra dijo que « yo creo que el rebrote va a ser gordo , pero como nos vuelvan a poner horarios y nos restrinjan, la economía del pueblo se va a resentir bastante. Lo suyo sería que cerraran solo en los lugares que hay peligro porque en una obra como esta en la que estamos tres compañeros dime qué peligro hay. Pero verás como nos toca a todos ».
Las quejas sobre los bares y la petición de no cerrar todo es, dicen, «para no pagar justos por pecadores». De hecho, Conchi Márquez, vecina que caminaba con la cesta de la compra, aludió al centro médico y al instituto como pruebas: « El centro médico debería estar abierto y está cerrado para atender solo por teléfono y luego en el instituto hay niños que han dado positivo y no han confinado las clases, eso por ejemplo va al revés».