26-J EN CÓRDOBA
Unidos Podemos mantiene su escaño pero se deja casi 22.000 votos en el camino de la confluencia
Monereo irá al Congreso tras unos comicios que cumplieron la profecía de Julio Anguita: «Cuidado con las encuestas»

El sueño de las encuestas produce monstruos. La decepción electoral de Unidos Podemos a nivel del país aguó también la fiesta en Córdoba a los simpatizantes de la coalición, que llegaban henchidos de confianza tras los prometedores resultados de las encuestas a pie de urna. La coalición mantiene el escaño que ganó Podemos en diciembre, pero la realidad es que la unión del partido morado con IU no ha sumado. Las cifras hablan por sí solas: el 26 de junio cayeron en las urnas casi 22.000 votos menos de los que obtuvieron, por separado, las dos formaciones en los anteriores comicios. Un vuelco inesperado.
«Hay que hacer autocrítica », sentenció el que será el único diputado por la provincia, Manuel Monereo , que admitió que no esperaba esos resultados «pero sí los temía». A su juicio, las elecciones «han premiado a los corruptos » y han servido para desmacarar aún más a un PSOE que «prefiere que gane la derecha antes que compartir un gobierno progresista y de izquierdas» con la coalición. «Se acabó el ciclo electoral. Pero seguiremos siendo un espacio político grande y de alternativa», afirmó. Junto a él, Antonia Parrado , la número dos de la lista, sacó pecho por el esfuerzo realizado en la campaña electoral tras haberse quedado sin asiento en el Congreso: «No ha sido posible por el fantasma del miedo . Pero debemos seguir en confluencia. Si no es hoy, será mañana».
No se llegó a temer por el diputado que les dio el 20-D, pero la ilusión por obtener un segundo escaño que habría llevado al Congreso a Parrado pasó como una estrella fugaz por la explanada junto a la Calahorra, donde Unidos Podemos se preparaba para una fiesta poselectoral. Las sonrisas del inicio, símbolo de su campaña, fueron congelándose hasta derivar en muecas de frustración a medida que los escrutinios revelaban un escenario muy distinto al soñado. Se fueron a dormir con un nudo en la garganta y en su cabeza, reverberando, la advertencia de Julio Anguita en aquel abarrotado mítin de líderes andaluces en la Plaza de la Juventud: « Cuidado con las encuestas, que las carga el diablo ».