Transporte
Uber deja de prestar servicio en Córdoba
Avisa a través de su plataforma de que ha suspendido su actividad en la provincia ante la caída de la demanda

Uber , la plataforma norteamericana de servicios de alquiler de vehículos con condutor ha dejado de operar en Córdoba . Así se desprende de los mensajes que están recibiendo los conductores de VTC que trabajan en Córdoba: «Debido a la gran caída de demanda de transporte urbano en los últimos meses, nos hemos visto obligados a suspender nuestro servicio en Córdoba. Puedes consultar las ciudades en las que seguimos operando en el siguiente enlace», reza el mensaje.
Tras levantarse el estado de alarma el pasado mes de marzo, la compañía ha mantenido un absoluto silencio sobre su regreso a la actividad en la ciudad de Córdoba, mientras que en otras zonas de Andalucía como Málaga o Sevilla -con un volumen de negocio superior vinculado a los aeropuertos- ha sido posible volver a ver circular los famosos coches negros de la firma californiana.
En concreto, a comienzos de año, eran 75 las licencias activas de Vehículos de Turismo con Conductor (VTC) en la provincia de Córdoba. Salvo casos residuales, la inmesa mayoría de estas licencias están en manos de Ares Capital , el gigante español de las licencias que domina la mayoría de permisos en el conjunto de Andalucía.
Ante la previsión de una enorme pérdida de volumen de negocio, esta compañía con sede en Madrid d ecidió aplicar un ERTE entre sus trabajadores el pasado mes de mayo que ha llevado a la práctica desaparición de este servicio en Córdoba.
Multinacionales sin negocio
«Son grandes empresas multinacionales que sacan a las personas del ERTE en función de sus necesidades. Así sucede que en Sevilla y Málaga están funcionando con normalidad, mientras que en Córdoba están trabajando de forma testimonial», explica el s ecretario general de la Federación de Servicios, Movilidad y Consumo de UGT Córdoba, Juan Martínez.
Este sindicato fue precisamente el encargado de liderar las negociaciones entre los empleados y Ares Capital, que amenazó con ERES, despidos y reducciones de jornada y que se saldó con un acuerdo para el mantenimiento de la plantilla por seis meses .
Una situación que ha vuelto a provocar la ira en el sector del taxi, que ya protagonizó grandes protestas cuando la aplicación aterrizó en Córdoba a finales de 2018 . «A ellos no les interesan ni los clientes ni las personas, y si no hay turismo al que meter la púa con los algoritmos de su aplicación, cierran el negocio, meten en ERTE a sus empleados y prescinden del servicio», critica el presidente de Auttacor , la asociación mayoritaria del taxi en Córdoba, Miguel Ruano.
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