Seguridad

Dos tercios de los casos de «cibercrimen» en Córdoba se quedan sin resolver

Los delincuentes van «un paso por delante», reconoce un mando de la Guardia Civil

Una agente de la Guardia Civil examina material informático en la Comandancia de Córdoba Valerio Merino

Rafael Verdú

El ciberespacio es un lugar seguro si se toman las precauciones adecuadas, pero puede convertirse en un quebradero de cabeza para quienes sufren cualquier tipo de delito penal por los nuevos canales de comunicación del siglo XXI, que pueden ir desde las amenazas hasta la estafa o la suplantación de identidad . Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado tienen graves dificultades para rastrear y perseguir a los delincuentes que hace de Internet su campo de maniobras. Los datos lo refrendan, como también lo reconocen los propios agentes.

El Portal Estadístico de Criminalidad del Ministerio de Interior ofrece información detallada sobre las infracciones penales relacionadas con la criminalidad en el ciberespacio en la provincia de Córdoba durante el año 2017 y anteriores —es el último ejercicio del que se ha hecho balance; el de 2018 estará listo en unas semanas—. Pues bien, de los 1.656 hechos conocidos por las Fuerzas de Seguridad del Estado (básicamente, Policía Nacional y Guardia Civil, encargados de la ciberseguridad) en la provincia de Córdoba, sólo se pudieron esclarecer 582 casos , aproximadamente una de cada tres denuncias. Sin embargo, en otro tipo de delitos las tasas de resolución de los agentes son muy superiores, de hasta el 80 por ciento.

También es preocupante el aumento del «cibercrimen» , tanto en Córdoba como en el resto del país. En 2011 sólo se registraron 752 casos , lo que supone más que duplicar la tasa en poco más de un lustro.

Precisamente por el auge de estos delitos relacionados con las nuevas tecnologías la Universidad de Córdoba organizó ayer el I Foro Sociedad y Seguridad en la Facultad de Derecho, en el que participaron destacados responsables estatales en la lucha contra el «cibercrimen» . Ninguno de ellos tapó con paños calientes una realidad que certifican los datos.

Miguel Camacho , experto del Gabinete de Coordinación y Estudios de la Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior, alertó sobre cómo «la ‘cibercriminalidad’ y las estafas por Internet están aumentando debido al mayor uso de las nuevas tecnologías». Y no sólo eso, sino que «los delitos esclarecidos están por debajo del 30% [en el global de España], una tasa inferior a la que se da en otro tipo de delitos, donde estamos por encima dl 80%» de resolución de casos. El fraude informático —básicamente, estafas por Internet— es, tal como explicó Camacho, el principal delito, pues se detectó en tres de cada cuatro casos (la proporción en Córdoba es similar, de un 72%).

En este foro de debate también participó Daniel Rodil , comandante jefe del Grupo de Ciberterrorismo de la Guardia Civil. Ante un público juvenil, principalmente estudiantes de Derecho, y en un ambiente desenfadado, el comandante reconoció lo que pocos poderes públicos se atreven a hacer: «Los ‘ciberdelincuentes’ van un paso por delante» de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, «pero rápidamente nos ponemos a su altura. Entonces ellos dan otro paso», y así comienza el juego del gato y el ratón . Los delincuentes cuentan a su favor, dijo el comandante, con un «casi» anonimato, pero los Cuerpos de Seguridad del Estado también tienen herramientas para perseguirlos incluso en la llamada «deep web».

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación