Steve Urkel en Capitulares

Juro que nunca más vuelvo a hacer una sugerencia a nuestro Ayuntamiento desde esta tribuna. Hace pocos días le propuse en broma que pincharan las ruedas del AVE a la altura de Puertollano para evitar así las molestas «visititas» de los turistas; y van y lo hacen, de otro modo, pero con el mismo efecto: dejando encerrados a un millar de visitantes en el Alcázar el pasado domingo. Hasta la Policía tuvo que intervenir para desfacer tamaño entuerto.

Si a principios de mes los turistas que visitaban nuestra ciudad decían que no recomendarían a nadie visitar Córdoba (al verse con las puertas de los museos y monumentos en las narices) mediado el mismo los dejan encerrados en el Alcázar, han de ser desalojados por las fuerzas de orden y, encima, se quedan sin visitar el centro cultural. Solo faltaba ver al equipo de gobierno esperando en la puerta formado en doble fila para dar coscorrones a los visitantes según iban saliendo. ¡Que no sugiero que lo hagan, ojo, que solo es una caricatura!

¿Pero, qué demonios le habrán hecho los turistas a este consistorio? No se entiende tanta inquina ni tanta falta de humanidad para amargar las vacaciones a cuantos vienen a visitarnos. Cualquier día se encontrarán los turistas con que no pueden ni conciliar el sueño porque las sábanas de los hoteles cordobeses estarán llenas de migas de galletas. Menos mal que nuestro Ayuntamiento no tiene acceso a los establecimientos hoteleros por ser privados, que si no...

Cada vez recuerda más este equipo de gobierno a Steve Urkel , ya saben, aquel personaje negro (¡era negro, yo qué le hago!) de la serie americana « Cosas de casa ». Se caracterizaba Steve por ser el más patoso entre los patosos, el más desmañado y metepatas que podamos recordar; cosa que tocaba, cosa que rompía el desgraciado. Y aún se pavoneaba de sus incompetencias, si bien de vez en cuando era capaz de reflexionar y preguntarse a sí mimos en voz alta: « ¿He sido yo? ».

Pues eso, que nuestro Ayuntamiento es Steve Urkel y hace un año que viene rompiendo lo que toca: la Ciudad Deportiva del Córdoba F.C. , la relación con las cofradías, la gestión del Alcázar, la relación con el cabildo catedralicio a cuenta de la Mezquita- Catedral , la organización de la Fiesta de los Patios , la relación con los caseteros (ojo que mañana empezamos), … Pero estos rompen las cosas y no se preguntan si han sido ellos, sino que tienden a poner la responsabilidad fuera de sí, generalmente sobre las espaldas del anterior gobierno que, por cierto, ya no está.

Y como no hay patrón del barco que mande más que el grumete, la nave zozobra entre las olas de la desorganización y la improvisación .

-¿He sido yo?

-¡Sí, carajo, has sido tú!