Cultura
La Sinagoga de Córdoba reabre al público tras 11 meses de obra y con lo principal todavía por ejecutar
Se trata de la integración de los importantes restos aparecidos en la excavación del solar adyacente
Once meses después, la Sinagoga de Córdoba abrió ayer sus puertas de nuevo al público tras las obras de conservación y restauración llevadas a cabo por la Consejería de Cultura en el enclave monumental cordobés, con la introducción de importantes mejoras en la Casa del Portero , restituyendo su cubierta y resolviendo los problemas de humedad que había. De igual modo, se sustituyeron las antiguas instalaciones de suministros y se procedió a la adecuación de sus plantas baja y alta para acoger dependencias administrativas y auxiliares, además de actuar en la restauración de la fachada con resanado, enlucido y encalado.
Hasta cuestiones técnicas que para el ojo del visitante apenas tiene repercusión entre lo que se podía ver antes de las obras y lo que se puede volver a ver ahora. De hecho, el propio Arturo Ramírez, responsable de la redacción del proyectos de recuperación y reforma de la Sinagoga, reconoció ayer que «se trata de obras muy ligeras, una intervención mínima en el interior del monumento y en la Casa del Portero, algo de la fachada y ciertos problemas que teníamos con el tejado». Actuaciones que, por cierto, vienen a complementar las de consolidación de los relieves en yeso y las bases de ladrillos interiores para que no se acaben perdiendo y que se llevó a cabo en un proceso anterior. Cuestiones que han de estar bien para la salud del edificio.
Pero lo principal está todavía por venir . En el proyecto redactado por el arquitecto Arturo Ramírez Laguna se habla de una excavación previa en la que apareció los que se supone que es una casa contemporánea a la Sinagoga «y que podría ser la del rabino que la atendía». Eso llevó a idear de cara a la recuperación del solar adyacente al monumento ubicado en el número 18 de la calle Judíos, un proyecto para edificar en la entrada un complejo explicativo sobre el monumento, a modo de centro de interpretación y recepción para el visitante, así como la recuperación de un espacio que podría haber sido una escuela hebraica junto a una «Mikvé » o zona de baño ritual para las mujeres.
De igual forma, en una intervención anterior también se pudo comprobar que la antigua muralla romana de Corduba pasaba por debajo de la Sinagoga, con lo que también se incluyó la posibilidad de realizar una excavación en condiciones para integrar todos esos elementos al actual monumento. «Se trata de una actuación teóricamente simple que implica el proceso de excavación, comprobar el interés real de lo que se descubra y hacer una pasarela para que el público pueda contemplarlo además de cubrirlo con una cubierta para mantenerlo a salvo de las inclemencias del tiempo», indicó el arquitecto.
El propio consejero de Cultura de la Junta, Miguel Ángel Vázquez , celebró ayer la reapertura de la Sinagoga. Es «una buena noticia», porque se pone a disposición de la ciudadanía cordobesa y de los visitantes «un espacio emblemático» que es el segundo más visitado tras la Mezquita-Catedral .