Coronavirus en Córdoba
La segunda ola del Covid-19 en Córdoba deja un 36% más de casos que la primera, pero muy poca letalidad
Desde el 19 de julio se han confirmado más de 2.200 positivos, pero los fallecidos son siete, frente a los 117 anteriores
Nadie está encerrado en su casa, la gente puede salir a la calle y los hospitales no parecen ser la zona cero de una castástrofe, pero la transmisión del Covid-19 ha vuelto a sus peores días, y hasta los supera. La curva vuelve a subir y no sólo iguala, sino que supera los momentos con más contagios.
El Instituto Carlos III , perteneciente al Ministerio de Sanidad , es el organismo que recaba todos los datos que envían las autoridades sanitarias. En el caso de Córdoba, los datos son los que recoge la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía , y tienen forma de U, porque van desde cifras altas, un progresivo descenso que se mantiene durante un tiempo en cifras mínimas o en el cero, y un ascenso igual de fuerte, o quizás más.
El primer día en que el coronavirus empezó a ser una realidad alarmente en la provincia de Córdoba fue el 10 de marzo , muy poco antes de que se anunciase el estado de alarma y el consiguiente confinamiento . Ese día se notificaron 23 casos positivos, cuando todo el país se preguntaba por el alcance de aquella enfermedad que acababa de llegar de Asia. No había hecho más que empezar a subir la curva, que alcanzó el punto más alto el día 26 de aquel marzo, con 93 casos. A partir de ahí no todo fue descenso, pero con el final de marzo las cifras dejaron de ser tan alarmantes. El 30, con 63 positivos notificados, fue el último día en que superaron el medio centenar, y en abril sólo hubo dos días por encima de los treinta.
La curva confirmó el descenso que parecía definitivo en mayo, que empezó con trece casos, siguió casi siempre por debajo de los diez, y por primera vez hubo días con cero casos nuevos. ¿Había para entonces pasado lo peor de la enfermedad? En los más de cuarenta días que van entre el 1 de junio y el 14 de julio apenas hubo 24 casos nuevos en total , cuando esta era la cifra de un solo día en otro tiempo. Parecía que el coronavirus había dejado atrás sus peores cifras, pero la nueva oleada estaba a punto de llegar. El 14 de julio fue el último día en que no hubo nuevos casos positivos reportados en Córdoba. El 15 y el 16 hubo 11 en cada uno, y para el día siguiente ya fueron treinta. Eran los días del brote de la discoteca La Posada de Babylonia .
Frente a los días del confinamiento, desde agosto se han superado por primera vez los cien casos al día
Fue el comienzo de la segunda ola, que tuvo muchos otros puntos además de la famosa fiesta de graduación, pero que comenzó entonces la ascensión que todavía no ha terminado. Según los datos del Instituto Carlos III , la fase más pronunciada comenzó el 10 de agosto, con 42 casos, y a partir de ahí rara vez bajó de esa cifra. La curva se hizo entonces más larga y con puntos más altos que la que había bajar en marzo y abril con el confinamiento. El 22 de agosto por primera vez se pasó de los cien contagiados en un solo día , ya que se llegóa 101, y hubo además varias jornadas por encima de los noventa al final del octavo mes del año.
Parecía que el peor momento había pasado cuando el 31 de agosto hubo 31 casos, pero de nuevo empezó a subir, y la última semana la curva ha vuelto a crecer: 89 casos el día 1, 87 el 2, 115 el 4 y 108 en la jornada de este domingo 6 de septiembre, cuando se informó de un nuevo fallecimiento y de seis hospitalizaciones menos. Dos personas más han abandonado la UCI.
El número de contagios de cada portador del virus no ha hecho sino reducirse desde los picos de julio
Entre el 8 de marzo y el 10 de mayo, por cercar las fechas en que la pandemia golpeó más fuerte, se registraron en Córdoba 1.618 casos . Entre el 19 de julio y el 6 de septiembre, cuando ha comenzado la segunda oleada, han sido 2.214. Es decir, un 36 por ciento más , pero hay ciertos datos que permiten pensar en que las luces rojas no tienen que encederse.
Más días y con mayor intensidad de casos, aunque también con menos mortalidad: hasta julio el número de personas que habían fallecido por el Covid-19 eran 117, mientras que ahora llegan a 124, tras la que falleció ayer. Los datos nacionales también apuntan a que, aunque los casos no paren de crecer, la letalidad es menor. También, una disponibilidad distinta de medios sanitarios. Las pruebas de diagnóstico se han generalizado. Con ellas, los positivos detectados.
También es significativa la evolución del llamado n úmero de reproducción básico instantáneo o Rt . Se define como el número promedio de casos secundarios que cada sujeto infectado puede llegar a infectar en una etapa de tiempo. Es decir, la velocidad en que la enfermedad puede ir pasando de unas personas a otras. La curva de este indicador es ligeramente distinta y comienza el 14 de marzo, cuando acaba de anunciarse el estado de alarma que tendría que comenzar dos días más tarde. Era de 3,27 y al mes siguiente ya cayó por debajo del 1.
La cifra volvió a subir a finales de mayo, cuando se aliviaron las medidas y la gente comenzó a poder salir, y en verano ya alcanzó cifras más altas que las que se dieron en los primeros días de la pandemia. La más alta fue el 1 de julio, con 5,75, en una época, sin embargo, en que apenas se daban casos. Ahora, cuando la pandemia está dando las peores cifras, el Rt están en unos números más bajos. El 30 de agosto se llegó a 0,88.
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