Sadeco detecta 187 focos de mosquito tigre desde enero, la mitad en agua acumulada en platos de macetas

El Departamento de Control de Plagas de la empresa municipal Sadeco ha realizado desde enero 211 inspecciones por avisos que alertaban sobre la presencia de mosquito tigre de las que 187 han resultado positivas, todas ellas en la zona Norte de la ciudad. Del total de casos, en 137 se hallaron focos de reproducción , una fase más avanzada del problema. La mitad de ellos se encontraron en agua estancada en platos de macetas en las viviendas y ninguno en piscinas, donde sí se ha encontrado presencia del mosquito «patrio».

Son algunos de los datos ofrecidos por el presidente de la empresa municipal, David Dorado (Cs), que ha estado acompañado por el jefe de director de Inspección e Higiene Ambiental, Enrique Flores, y el doctor de la Universidad de Córdoba Rafael Obregón. Han avisado de que el mosquito tigre es una especie invasora que ha venido para quedarse. No se le puede combatir, dicen, pero sí evitar su propagación desde las propias viviendas. De ahí que Sadeco se haya puesto manos a la obra para concienciar y educar a los vecinos de las zonas afectadas de la necesidad de eliminar todo resto de agua estancada en patios, jardines e incluso cocinas. Se han visitado más de mil viviendas desde inicios del verano y se ha buzoneado un tríptico informativo en las casas donde no se pudo hablar personalmente con sus habitantes.

Y es que el mosquito tigre es hábil a la hora de elegir dónde poner sus huevos. Según Sadeco , en las inspecciones realizadas se han hallado focos de insectos también en arquetas y sumideros, jarrones, fuentes y estanques ornamentales, sistemas de riego y en menor medida en bebederos de mascotas. Su propagación por España tiene mucho que ver con el cambio climático aunque los expertos afirman que una ciudad como Córdoba, con pocas lluvias, no ofrece el hábitat ideal para su instalación, por lo que el problema será menos grave que en otros lugares como el litoral valenciano.