CULTURA
De Romero de Torres a Sorolla: La honda huella de la Edad de Plata del arte español en Córdoba
El apogeo cultural del primer tercio del siglo XX vio alcanzar su madurez a Garnelo o Inurria e inspiró a Benlliure o Regoyos
![De Romero de Torres a Sorolla: La honda huella de la Edad de Plata del arte español en Córdoba](https://s3.abcstatics.com/media/andalucia/2019/09/22/s/arte-cordoba-plata-grande1-kJ2G--1248x698@abc.jpg)
España vivió en el primer tercio del siglo XX una edad de plata de su cultura , que se puede decir que empezó con una desgracia discutible -la pérdida de las últimas colonias- y que acabó con una desgracia incuestionable: el inicio de la guerra civil . Entre 1898 y 1936 se vivieron décadas de gran fertilidad creativa, con generaciones sucesivas como la del 98, la del 14 y la del 27, que contrastan con la inestabilidad política del reinado de Alfonso XIII. Madrid fue el eje de aquel gran movimiento, aunque ciudades como Córdoba tuvieron su protagonismo y aportaron grandes creadores, casi todos ellos nacidos en la segunda mitad del XIX y fallecidos en la primera mitad del XX.
![La Feria de Córdoba según Romero de Torres](https://s3.abcstatics.com/media/andalucia/2019/09/22/s/romero-detorres-cordoba-kJ2G-U303064316739Ra-220x320@abc.jpg)
La ciudad y la provincia también fueron destino e inspiración de grandes escritores del momento como Pío Baroja , que ambientó en ella «La feria de los discretos», o de escultores como Mariano Benlliure , cuyo mausoleo de la Vizcondesa de Térmens en la ciudad de Cabra, de 1914, acaba de ser declarado Bien de Interés Cultural hace apenas unos días.
Artista cordobés destacadísimo del periodo fue sin duda Julio Romero de Torres , cuya obra respira cordobesía por los cuatro costados e incluso redefine el paisaje de la urbe y de la mujer cordobesa con nuevos arquetipos. Coetáneo suyo es otro gigante, Mateo Inurria , uno de los grandes escultores del momento junto al propio Benlliure , Julio González o Pablo Gargallo . Y también pintores como el valenciano afincado en Montilla José Garnelo y Alda, el cordobés Tomás Muñoz Lucena , los hermanos de Julio Romero, Rafael García Guijo o los prieguenses Adolfo Lozano Sidro o José Moya del Pino , ilustradores ambos del «Blanco y Negro» de ABC y creador el segundo de la Expedición Velázquez, que en esos años llevó réplicas de las obras del maestro sevillano del Siglo de Oro por Estados Unidos. La banda sonora a este ramillete de artistas cordobeses podría ponerla a su vez un cantante nacido en Pozoblanco, el gran barítono Marcos Redondo Valencia , que debutó en el Teatro Real de Madrid en 1913 con «La Traviata» y que estaría en activo hasta los años 50.
![El Patio de los Naranjos visto por Sorolla](https://s1.abcstatics.com/media/andalucia/2019/09/22/s/sorolla-cordoba-patio-kJ2G-U303064316739CL-220x270@abc.jpg)
La historia y la huella en Córdoba de estos artistas es más o menos conocida en su tierra, algo que no es tan común con creadores de la época nacidos en otros lugares. Por ejemplo, a Sorolla lo asocia todo el mundo con el mar Mediterráneo de su Valencia natal, pero poca gente sabe que pintó el Patio de los Naranjos en varias ocasiones y que quedó cautivado con la ciudad. Viajó por tierras andaluzas a inicios del siglo XX, cuando era quizá el pintor más famoso de España, embarcado en un proyecto pictórico de la Hispanic Society of America . En su correspondencia a su esposa y musa, Clotilde García del Castillo, deja testimonio de lo mucho que le había gustado Córdoba e incluso su Feria, como explica el historiador Miguel Lorente en una tesis doctoral reciente sobre el artista.
También curiosa es la estancia en esta tierra del pintor vasco Ignacio Zuloaga , que vivió durante largas temporadas de su vida en Sevilla y viajó a la ciudad cordobesa con su amigo Auguste Rodin , el gran escultor francés. Conocieron durante su estancia a Mateo Inurria y Zuloaga adquirió, unos dicen que por 5.000 pesetas y otros dicen que por mil, un fragmento del retablo del «Apocalipsis» de El Greco, que estaba en propiedad de un médico de la ciudad y que antes había pertenecido a Antonio Cánovas del Castillo , fundador en el XIX del Partido Conservador y artífice de la Restauración. El historiador José Romero Portillo escribió un libro sobre las andanzas sevillanas y cordobesas de Zuloaga, de las que también se puede leer en el blog de Hotel Viento 10, uno de los rincones más singulares y valiosos de la red en lo que se refiere a la divulgación de la historia de Córdoba.
![Autorretrato de Zuloaga](https://s2.abcstatics.com/media/andalucia/2019/09/22/s/auto-retrato-cordoba-kJ2G-U303064316739CLE-220x250@abc.jpg)
En dicho blog se explica por ejemplo que ese mismo «Apocalipsis» de El Greco , que se considera que fue año más tarde inspiración para Picasso en «Las señoritas de Avignon», había sido ambicionado antes por Pío Baroja y por el pintor asturiano Darío de Regoyos , que lo descartaron finalmente por el precio. También se señala que a Rodin le desagradó la obra del El Greco hasta el punto de recomendar a Zuloaga que no comprase esta pintura, aunque el vasco se hizo fuerte en su decisión y no tomó en cuenta la opinión del amigo.
En cuanto al propio Darío de Regoyos , maestro del impresionismo español , también hay que decir que no se limitó en su estancia en Córdoba a querer comprar la obra del El Grec o , sino que sacó el caballete, los pinceles y el lienzo y dejó varias estampas de la ciudad. La calle de Santa María de Gracia o la torre de la parroquia de Santiago fueron algunos de los elementos que le sirvieron de ambientación, a los que se une, según descubrimiento del blog Hotel Viento 10, otra obra mas ambientada en los jardines de Palacio del Marqués de Benamejí , sede actualmente de la Escuela de Artes y Oficios Dionisio Ortiz, en la calle Agustín Moreno, y escenario literario de « La feria de los discretos » de Baroja. Todo eso hace indicar que Regoyos pateó a fondo los barrios de la Axerquía durante su estancia cordobesa.
Sorolla es célebre por retratar el Mediterráneo, pero pocos saben que la Mezquita-Catedral le cautivó
La huella de la escultura de esta época no se queda tampoco únicamente en obras como el Gran Capitán de Las Tendillas de Inurria o el mausoleo de Cabra de Benlliure, pues el propio escultor valenciano dejó otra obra emblemática en Córdoba capital: la estatua del escritor y político Ángel de Saavedra , el Duque de Rivas , en los Jardines de la Victoria . Se trata de una pieza realizada en los años 20, en bronce, y fascina por la capacidad del artista para dar forma a los pliegues de la vistosa capa o a los rizos románticos que coronan la testa del célebre autor de « Don Álvaro o la fuerza del sino ». La estatua del Duque, elaborada por Benlliure en su madurez, está considerada como una de sus obras maestras.
![Santa María de Gracia según Regoyos](https://s2.abcstatics.com/media/andalucia/2019/09/22/s/Dario-deRegoyos-cordoba-kJ2G-U303064316739TqH-220x270@abc.jpg)
La geografía de la Edad de Plata de la cultura española tiene como último destino el Museo de Bellas Artes, en el Potro, que dispone de obras de artistas de esa época como Rusiñol , Ramón Casas o los mencionados Sorolla y Regoyos . Proceden muchas de esas obras del novecientos de la donación que realizó en los años 20 el pasado siglo otro señero personaje de esta época brillante de la cultura, el político y artista Ángel Avilés Merino . También la Biblioteca Municipal se benefició de la generosidad de este coleccionista, al que hoy Córdoba recuerda con una calle situada a escasos metros de la estación de trenes.
La geografía cordobesa y el recuerdo de otras obras permiten por todo ello realizar un recorrido cuando menos sugerente por un momento destacado de la creatividad española, que es considerado por muchos como el segundo más importante de su historia tras el inalcanzable Siglo de Oro. Aunque la guerra civil del 36 acabase por poner un final abruto a tal festín artístico, aún se puede disfrutar de las obras de aquellos hombres que en Córdoba tuvieron en muchos casos su niñez o su madurez creativa y en otros casos una importante fuente de inspiración.