Los retrasos que no sirvieron de nada

La Intervención municipal ha alertado de que ninguna de las dos ampliaciones de plazo tramitadas en el Centro de Convenciones (la que se pedía era la tercera) sirvieron para acelerar el trámite de obra. Muy al contrario, su dictamen afirma que la situación es cada vez más problemática hasta llegar a la práctica paralización. Ayer mismo, en todo el edificio apenas había trabajando un puñado de operarios.

Tanto en agosto como en noviembre de 2016, el Consistorio accedió a dar nuevos plazos con el objetivo de permitir a la empresa adjudicataria UCOP de que acabase el proyecto. Se trataba de retrasos no imputables a la sociedad mercantil. Intervención emitió en ambas ocasiones informes contra la medida al entender que no había ninguna justificación. El cogobierno optó por ignorar esos informes. Esta vez ha asegurado que no lo pretende levantar.

El planteamiento de la Intervención es que no hay ninguna posibilidad de que se acabe la obra en el nuevo plazo porque lo dice la empresa. De hecho, lo que dice la empresa es que no es posible acabar la obra de ninguna manera con el actual marco contractual. El Consistorio lleva año y medio dándole vueltas a modificar el contrato por razones objetivas de obra.

Intervención ha aprovechado para darle un toque severo al equipo de gobierno. El pasado jueves llegaron al despacho de la responsable del departamento los once tomos de los que consta el expediente. El dictamen solo se ha podido realizar sobre un análisis somero y sin los plazos establecidos en la ley.