Comercio
El reto de una trabajadora de la residencia de Pozoblanco para gastarse 6.000 euros en un día
Maribel Fernández gana el premio del comercio local de un día de compras frenéticas, a 600 euros máximo por negocio
6.000 euros, esa es la cantidad que gastó ayer Maribel Fernández , una vecina de Pozoblanco tras convertirse en la ganadora del sorteo que la Asociación Pozoblanco, Ciudad de Compras desarrolla durante la campaña navideña. La papeleta de la ganadora fue elegida de entre las casi más de cincuenta mil aportadas por los ochenta y un establecimientos que han participado este año. Las bases del concurso señalaban el viernes 8 como el día para gastar esa cantidad de dinero en los establecimientos adheridos elegidos, con una única condición: no gastar más de 600 euros en una tienda .
La ganadora, trabajadora de una de las residencias de mayores de la localidad, recibió la noticia mientras estaba en su puesto de trabajo y la alegría se desató al igual que una cadena de mensajes para dar la enhorabuena. «Creía que era precisamente de la tienda donde eché la papeleta y me llevé una gran sorpresa cuando me dijo que era el presidente de la asociación y que había ganado el premio de los seis mil euros», explicó.
A las nueve y media de la mañana, y después de un pequeño desayuno compartido con responsables de la asociación, la ganadora se dispuso a afrontar una jornada maratoniana de compras que ya estaba más que planificada. Y es que tras recibir una llamada que le costó creerse porque «esto es algo que siempre piensas que no pasa y menos a una misma» tocó pensar en qué gastar el premio para organizar el día e ir con las compras más o menos definidas, aunque siempre hay espacio para las improvisaciones y para los «caprichos» .
Primera compra
La primera parada, como suele ser habitual, no pudo ser otra que la tienda donde compró y rellenó la papeleta con la que ganó 6.000 euros. Una tienda de muebles de la localidad que también se convirtió como en protagonista y su responsable, Anabel Plazuelo , se mostró como si hubiera otorgado el gran premio de la lotería. «Es una clienta conocida y nosotros estamos tan contentos como si nos hubiera tocado a nosotros», relató.
Este año, la participación en este concurso era fundamental para fomentar el consumo local ante la compleja situación de muchos empresarios y sectores por la pandemia.
Allí, en la tienda donde se coció el premio, Maribel Fernández compró una mesa y unas sillas para después poner rumbo a otros establecimientos de la localidad. En la lista se colaba lo principal, lo necesario enfocado a cuestiones del hogar , aunque también hubo espacio para los caprichos como ya vaticinó la ganadora que expuso que «iré a una joyería para darme un capricho».
Lo hizo ante la atenta mirada de algunos familiares que la acompañaron en una jornada muy especial donde no fue necesario mirar la cartera continuamente para comprar, tan sólo ir restando los importes de los productos adquiridos a 6.000 euros que fueron saboreados en un año donde la ganadora ha vivido la pandemia de cerca al trabajar en una residencia de mayores .