CIUDAD DEPORTIVA
La realidad de una historia interminable
El Córdoba sigue sin disponer de unos terrenos para contar con una instalación propia
Carlos González , presidente y propietario del Córdoba CF, dijo hace tres semanas ser que daba un plazo de «quince días» para que se desbloqueara la situación de la cesión de terrenos por parte del Ayuntamiento de Córdoba y para que el club edificara su eterno proyecto de ciudad deportiva. Asimismo, argumentó que de no ser así su empresa apostaría por la compra de unos terrenos privados.
De momento, y franqueado ese espacio de tiempo, la entidad blanquiverde no ha tenido nuevos contactos con el equipo de gobierno del Ayuntamiento de la ciudad ni tampoco ha confirmado la compra de suelo para iniciar los trámites pertinentes. En este segundo sentido, todos los indicios apuntan a un emplazamiento en Encinarejo , uno de los puntos que más interés ha puesto para que el histórico proyecto cordobesista se lleve a cabo.
En la ELA, se trabaja en esa opción con terrenos privados «preparados» y con la tramitación realizada incluso con la Diputación de Córdoba supervisando esa posibilidad. Sin embargo, esto también ha suscitado batalla política entre el Ayuntamiento de Encinarejo y el de Córdoba en cuanto a competencias.
Estos episodios no dejan de ser continuaciones de los que también sucedieron con la cesión de terrenos del Parque Canal , llevados a pleno y aprobados bajo la alcaldía de José Antonio Nieto. Pero que se encontraron con una serie de impugnaciones , entre las que estaban las de Ecologistas en Acción, que finalmente se validaron para revocar esa posibilidad hace tan sólo dos semanas. En sí, una tormenta política entre los distintos grupos políticos.
Por lo tanto, el Córdoba continúa como siempre. Es decir, sin una ciudad deportiva en propiedad. Actualmente utiliza la que fue construida por el empresario Rafael Gómez Sánchez cuando presidía el consejo de administración del CCF en la última década del pasado siglo XX. Precisamente, estos terrenos son los «preferidos» por el gobierno municipal para destinarlos al Córdoba, que debería negociar con la multinacional Tremon , que es su actual propietaria tras quedarse con una serie de bienes de Gómez en la zona del Camino de Carbonell. De fondo, también queda la opción de Rabanales XXI , a la que no se le ha prestado atención, pese a que son de titularidad municipal y están bien situados a la entrada de la ciudad.
En sí, una historia que parece interminable y de la que se le siguen acumulando capítulos como el de la opción que hace tres años se anunció de unos terrenos colindantes a la A-45 y que, por cierto, tendría el nombre de Juanín , algo que con el tiempo el consejo de administración del Córdoba también ha olvidado.