Crónicas de Pegoland
Como un cohete
Acaba el sumario Rocket, esa historia de tercermundismo judicial
EL 22 de octubre de 2013, hubo quien se levantó con un sofoco de los gordos. Un destacamento de la Guardia Civil , debidamente uniformado y con las órdenes judiciales en regla, se plantó en Peñarroya-Pueblonuevo y se llevó detenida a la que entonces era su alcaldesa, Luisa Ruiz, de su domicilio familiar. Registró, entre otros, el edificio consistorial buscando documentos de un presunto fraude a gran escala de los fondos Miner . En total, se sospecha que se gastaron de aquella manera 12,5 millones de euros en ayudas para los municipios mineros donde ya no había minas.
Siete años después de aquellas 48 horas de locos que acabaron con el secretario general del PSOE, Juan Pablo Durán , dando gracias porque no les hubiese tocado la jueza Alaya («La derecha ni hace prisioneros, ni deja heridos. Sólo saben matar en las cunetas que es donde siempre nos han dejado a los socialistas», dijo en aquel memorable discurso), el juez que lleva el caso ha dado por concluida la instrucción. Cuatro personas se sentarán en el banquillo tras descartarse la presunta participación en los hechos de otras trece.
Ocho jueces distintos (repito, ocho) han llevado el caso que constituye un homenaje a lo peor del funcionamiento judicial en España. Durante un largo periodo, los miles y miles de folios del sumario se apilaban en el juzgado porque no había personal disponible para escanear los documentos. Mientras en el resto del orbe cristiano se desarrollaban las tecnologías de la información hasta límites desconocidos por la humanidad, el juzgado de un país europeo, desarrollado, tenía carencias propias del tercer mundo para investigar el gasto millonario y presuntamente fraudulento de dinero público.
Tengo serias dudas de que esto llegue a algún sitio. Lo que parece claro es que la Justicia no es justa si es tan extremadamente lenta e ineficiente. Para cuando esto se acabe, recursos y sentencias mediante, habrá pasado una década larga desde que los guardias civiles se bajaron del Patrol y sacaron los grilletes. «Rocket» es la palabra inglesa para cohete . Al que se le ocurrió el nombre de la operación era una mente avanzada. Nostradamus, casi.
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