El Norte del Sur

El casetero en su laberinto

«Tenemos las carnes abiertas: tú no sabes lo que se han encarecido el montaje y todos los preparativos»

Plano de la Feria de Córdoba 2022: mapa de todas las calles y casetas

Feria de Córdoba 2022 | Todo lo que tienes que saber

Un operario pinta la portada de una caseta en el recinto ferial del Arenal de Córdoba Valerio Merino
Rafael Aguilar

Esta funcionalidad es sólo para registrados

EL casetero lo dice en un aparte de la presentación de un acto paralelo a la Feria de Nuestra Señora de la Salud , «porque la Feria se llama de Nuestra Señora de la Salud y no del Arenal», precisa. «Tenemos las carnes abiertas: tú no sabes lo que se han encarecido el montaje y todos los preparativos : el Ayuntamiento no ha de extrañarse de que de nuevo estemos bastante lejos de las cien casetas, y si hemos llegado a ochenta y siete es de puro milagro».

El hombre, que forma parte del en sus inicios incomprendido grupo de titulares de carpas en el recinto que se empeñó hace quince años en darle lustre a la celebración y al que le cayó lo más grande porque el ‘tardorrosismo’ vio en su celo por el embellecimiento una amenaza ‘sevillita’, teme que los socios y la clientela en general de la sede efímera de su asociación a un palmo de la portada no comprendan o que se enfaden porque el esfuerzo financiero al que la junta directiva ha tenido que hacer para que todo esté a punto este viernes redunde, para mal, en la tabla de precios: «Es imposible no subirlos: va a haber cabreo de la gente, y al final la culpa nos la echarán a nosotros», augura.

Y luego está el Covid, la séptima ola de la que se resiste a hablar la Junta: «Nos podían decir, quien corresponda, cuáles son las reglas, las normas que tenemos que seguir. Porque no hay nada claro», se extiende con cierta razón, porque, afirma, lo único que está escrito es una serie de recomendaciones municipales que vienen en las bases de la fiesta... que se redactaron y publicaron en diciembre del año pasado.

«Con qué cara le vas a pedir a alguien que se deje puesta la mascarilla en el interior de una caseta. ¿Y cómo se hace eso de mantener la distancia social? Me lo cuentas cuando el conjunto esté tocando», esgrime. Y los aforos de fondo: los guardias de seguridad van a tener trabajo por partida doble, porque ahora en sus tareas se acumulan el celo por el decoro, que viene de siempre, y la vigilancia epidemiológica: «Es que el problema es que las circunstancias nos van a obligar a quedar mal con nuestros amigos : que te llama un compromiso o me llamas tú que estás por allí y resulta que me veo en el mal trago de no poder atenderos como os merecéis. Esto se nos va a ir de las manos. Lo que yo te diga».

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación