DÍA DE TODOS LOS SANTOS
Radiografía del sector funerario | Las cremaciones son ya la opción elegida por el 60% de los cordobeses
De las 2.799 defunciones registradas el año pasado, 1.072 acabaron en inhumaciones, según datos de Cecosam
Entre cremar y sepultar los restos mortales de un familiar fallecido, aproximadamente el 60 por ciento de los cordobeses opta ya por la incineración de sus seres queridos. Así lo reflejan los últimos de la empresa municipal de cementerios (Cecosam) , que muestran una evolución «in crescendo» a lo largo de los últimos años de las incineraciones frente a los enterramientos.
Así, si hace veinte años cerca del 80 por ciento de los fallecidos en Córdoba (2016 de las 2.521 personas que murieron en 1999) acabaron descansando en nichos, tumbas y panteones, el pasado 2018 solo representaron el 38,3% (1.072 de los 2.799 difuntos). El resto, fueron reducidos a cenizas.
La cremación es una alternativa relativamente nueva. Hasta 1964, la Iglesia Católica no autorizó esta práctica. Fue durante el papado de Pablo VI cuando se dictaminó que la incineración no se oponía a ningún dogma de fe. El primer horno crematorio fue instalado en el cementerio de la Almudena de Madrid en 1973. Y el motivo no fue otro que dar resupusta, si surgía, a la demanda de algún extranjero.
Desde entonces, el número de cremaciones ha ido en aumento en toda España, y Córdoba no escapa a esta tendencia , según asegura el gerente de Cecosam, Pedro Ruiz. «En 2010 ya se registraban las mismas inhumaciones que incineraciones, y ahora hemos llegado a ese porcentaje del 60/40, que, según las previsiones, parece que va a seguir incrementándose».
En un primer momento la incineración supuso un ahorro considerable para las familias ya que permitía eliminar los gastos de la inhumación, lápida y nicho. Sin embargo, hoy en día, la amplia gama de urnas disponibles y la proliferación de columbarios han conseguido que el gasto de la incineración sea casi equiparable al de la inhumación.
Hoy en día las funerarias ofrecen «paquetes básicos» por menos de 2.000 euros , que incluyen la preparación del cadáver, el féretro, una corona o un centro de flores, cremación (con urna básica) o nicho por un plazo determinado, una ceremonia laica o religiosa, el papeleo y el coche fúnebre, entre otras prestaciones.
España, con una tasa de cremación del 41,22%, dispone del m ayor número de hornos crematorios de Europa con 442 hornos. Con este número de hornos se pueden realizar una media de 1.768 incineraciones para una demanda media de 400 incineraciones diarias.
En cuanto a los enterramientos , de los 1.072 contabilizados en año pasado en los cementerios que gestiona Cecosam, la mayoría (975) utilizaron un nicho; 54, en panteones; y una decena, en sepulturas. Llama la atención que 24 fueron «inhumaciones benéficas», aquellas que se realizan a personas sin recursos que han fallecido. El gasto lo asume en parte el Ayuntamiento, según explica Ruiz.
La empresa municipal de cementerios cordobesas se encuentra inmersa en un ambicioso proyecto que pretende una mayor apertura al público de sus instalaciones para un mayor conocimiento de las mismas, «y que las visitas no se concentren únicamente en fechas señaladas, como el puente de Todos los Santos», señala su gerente.
Dar «vida» a los cementerios
Así, entre las propuestas que se pretenden llevar a cabo figuran visitas teatralizadas, representaciones históricas, recorridos culturales «y hasta actuaciones de estudiantes del Conservatorio de Música, siempre guardando un respeto absoluto a todas las personas», destaca Ruiz.
Durante 2018, en el que fallecieron en España 426.053 personas, el sector funerario facturó 1.530 millones de euros , un 0,57% más que el año anterior. Una cifra de volumen de negocio que supone el 0,13% del PIB nacional, según recoge el informe «Radiografía del sector funerario 2019» , publicado por la Asociación Nacional de Servicios Funerarios (Panasef).
El número de instalaciones funerarias (tanatorios, velatorios y crematorios) continua en aumento. Pansef estima que operan 2.525 en España, con 7.050 salas de velatorio, para hacer frente a una demanda media de 1.167 fallecimientos diarios. En Córdoba hay un total de 66 , según este estudio.