Primera plana
El PSOE apostata de la progresía radical
Para sellar la continuidad de las visitas nocturnas a la Mezquita, abjuró de la reivindicación de que el monumento sea público
La alcaldesa, Isabel Ambrosio , no es buena gestora pero lleva toda una vida morando en despachos oficiales y sabe jugar a la política : hay ocasiones en las que es mejor cambiar el paso que seguir caminando hacia el abismo, aunque eso implique caer en la contradicción . Lo acabamos de ver en el acuerdo firmado por el Ayuntamiento y el Cabildo para prorrogar las visitas nocturnas a la Mezquita-Catedral , un producto importante para que los viajeros dejen de cometer el pecado de creer que Córdoba se ve, como mucho, en día y medio. Para sellar ese convenio, antes de que el gallo cantara una vez, no tuvo problema en negar a sus socios de gobierno -el pacto lo cerraron los socialistas sin contar con IU, abiertamente enfrentada con la Iglesia- y en abjurar de facto de la reivindicación de que nuestro principal monumento sea público.
Porque, en este acuerdo, Capitulares (facción del puño y la rosa) reconoce al Cabildo como dueño del templo , aunque el PSOE durante tres años se convirtió a las tesis absurdas de demandar que sea de todos. No en vano, fue uno de los puntos del pacto de investidura con IU y Ganemos que permitió la ascensión de Ambrosio a la Alcaldía, obrando el milagro de ser primera edil pese a ser la regidora con menos votos de la Democracia. La alcaldesa parecía tan consagrada a esta batalla que hasta creó hace un año una comisión para cargarse de argumentos ante el hipotético, y descabellado, escenario de reclamar a un juez un bien que es de la Iglesia desde hace sólo ocho siglos.
La cercanía de las municipales ha descabalgado al PSOE de esta reivindicación. A nueve meses de que se pongan las urnas, los socialistas no querían otro martirio por la gestión -y hubiera llegado si las visitas nocturnas hubieran acabado- y empiezan a apostatar de la progresía radical que abrazaron con tal de gobernar. Pescar votos en el centro, es fundamental para que el PSOE cumpla su anhelo inconfesable: mejorar su resultado, llegar a ser el partido más votado y sumar con un Ciudadanos emergente mayoría absoluta. El partido del puño y la rosa de Ambrosio o de Susana Díaz, el de toda la vida por mucho que ahora lo disfracen de nueva política, se siente más cómodo con la fuerza naranja que con IU y Podemos , que le obligan a virar a su izquierda.
Además, la regidora ha exhibido perfil propio, ninguneando al primer teniente de alcalde y edil de Turismo y Urbanismo, Pedro García (IU) . Este último le ha liado a la primera edil más de una este mandato y se ve que ella tenía un límite en lo de ponerle la otra mejilla a alguien que, y sólo hablando de turismo, ve en esa actividad no un don divino para la economía local, sino una de las formas que adopta el satán del capitalismo . A medida que se acerquen las elecciones, el bipartito se enfrascará en más batallas internas, con lo que la gestión municipal vivirá nuevos y mayores tormentos en el infierno en el que vive sumida.