Provincia
La honda huella que dejan las Escolapias en Cabra
Fue en 1899 cuando la congregación abrió el Colegio San José de Cabra: las religiosas se marchan pero queda su labor
«Quiero salvar las familias enseñando a las niñas el santo temor de Dios» con este lema comenzaba la catalana Santa Paula Montal su labor fundadora de escuelas destinadas a la enseñanza a las niñas tanto de labores de manos cómo fue el oficio de bolilleras, que ella misma aprendió de niña como otras enseñanzas entre las que primaba la lectura y la escritura. Bajo el lema Calasancio de 'Piedad y Letras' comenzaba la congregación Escolapia la fundación de distintos colegios por distintos lugares de la geografía nacional y también de Latinoamérica.
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En Córdoba también llegaba la obra escolapia siguiendo el ejemplo de entrega de Madre Paula y muestra de ello, hoy permanecen educando a las nuevas generaciones colegios como Santa Victoria o el Calasancio, así como el Colegio 'San José' de Cabra el cual abría sus puertas a la docencia tras la llegada de las religiosas en el año 1899. Un centro, que en esto días se entristece por la decisión tomada por la dirección provincial del Instituto de las Hijas de María, de retirar la presencia de las religiosas en al ciudad egabrense, sin que ello, por el momento, suponga el cierre del colegio.
Aunque el centro educativo de carácter concertado sea gestionado por la Fundación Escolapias Montal , manteniendo la identidad que lo ha caracterizado durante casi un siglo y cuarto, la falta de las religiosas en su vida cotidiana será sin duda echada en falta, por todo lo bueno que han venido transmitiendo a las familias Egabrenses. Porque no todo ha sido docencia a lo que se han dedicado las religiosas, pues en numerosas ocasiones y, prácticamente bajo anonimato, han venido ayudando a familias necesitadas a través de sus gestiones, asegurando la educación gratuita cuando eran otros tiempos y haciéndose presentes a su vez en la vida social de Cabra cada vez que se las ha requerido.
Las religiosas escolapias se van de Cabra atendiendo a la reorganización que ante la falta de vocaciones se viene produciendo en diversos territorios y eso que en la ciudad De la Fuente del Río últimamente venían quedando muy pocas religiosas, ya mayores de edad, a las que las dimensiones del Castillo de los Condes de Cabra se les venía haciendo grande no solo para mantener sino para custodiar.
Un castillo que seguirá viendo a los alumnos corretear por sus galerías y sus patios luminosos, pero que echará en falta la lucha que y el buen hacer de las que han venido siendo sus moradoras, que siempre han velado porque todas las dependencias estuvieran limpísimas, además de bien cuidadas.

Además, las religiosas se irán sin haber recibido la medalla de Oro de la Ciudad cuya concesión anunciaba el propio alcalde de la ciudad, Fernando Priego, en febrero de 2020 en el marco del 120 aniversario de su llegada a la ciudad y que por culpa de la pandemia no se pudo entregar en un acto solemne como ha caracterizado a este tipo de condecoraciones. En este caso el reconocimiento iba destinado a premiar la labor de las religiosas en pro de fomentar una educación basada en unos firmes valores y la fe. Y es que el colegio escolapio ha sido entre otras cosas, un claro referente para la educación en igualdad durante décadas, al igual que en otros valores como son el fomento del compañerismo, la generosidad, la ayuda desinteresada, el respeto, la concienciación sobre el medio natural y un amplío etcétera.
Sin la presencia de las religiosas, el colegio deberá seguir funcionando con las mismas pautas con las que ha sido todo un referente en la ciudad, al igual que otro de los centros educativos históricos como es el Instituto Aguilar y Eslava, en el que históricamente se ha seguido la labor educativa de centros como el escolapio, del que también han salido alumnos destacados que hoy en día ocupan importantes puestos en la sociedad. Una de las antiguas alumnas del colegio 'San José' precisamente la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo , además han sido alumnos el actual delegado provincial de Agricultura en Cordoba de la Junta de Andalucía, Juan Ramón Pérez.