INVESTIGACIÓN
Un profesor de la UCO da cuerpo al informe del Carnaval de Cádiz para el Catálogo de Patrimonio
El especialista en Antropología Social José María Manjavacas es natural de la cuna de esta manifestación popular
Un investigador de la Universidad de Córdoba ( UCO ), el profesor de Antropología Social José María Manjavacas , gaditano de origen, ha elaborado por encargo de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía la documentación técnica para la inclusión del Carnaval de Cádiz en el Catálogo General del Patrimonio Histórico de Andalucía en la tipología Actividad de Interés Etnológico.
El informe incluye una aproximación histórica a este arraigado fenómeno sociocultural de la que destaca su evolución, a diferencia de otras celebraciones rurales, «hacia un modelo de carnaval urbano bajo influencias francesas e italianas, en una permanente tensión entre las expresiones populares de libertad, burla y transgresión carnavalesca y las restricciones e intentos de refinamiento y control por parte de las élites sociales y las autoridades conservadoras locales, tensión que sentó en las dos últimas décadas del siglo XIX y hasta mediados de los años treinta del siglo XX las principales bases del Carnaval que ha llegado a nuestros días».
Prohibido durante el franquismo, aunque presente en los imaginarios y prácticas populares, renació con fuerza durante la transición, quedando institucionalizado en 1980 a partir de un proceso participativo impulsado por el primer ayuntamiento democrático tras la dictadura.
Sátira social y crítica política
En sus aspectos etnológicos, el informe señala que el Carnaval de Cádiz «condensa un amplio y diverso conjunto de manifestaciones de la identidad local, con formas particulares de hablar, declamar y cantar y con componentes de transgresión ritualizada de la normalidad social, de inversión de roles, sátira social y crítica política».
Tras relacionar y describir las actividades más significativas y sus expresiones muebles asociadas, concluye que los ámbitos vinculados al desarrollo de la celebración festiva comprenden la práctica totalidad del casco histórico de Cádiz , soporte físico de las celebraciones carnavalescas callejeras, tanto programadas como espontáneas. Estas celebraciones constituyen, «por encima de otras consideraciones, el bien cultural patrimonial a salvaguardar , reforzando así la legitimidad de las expresiones carnavalescas populares en el espacio público».