Coronavirus Córdoba
«Parking», el drama romántico rumano rodado en Córdoba llega a la gran pantalla de Filmin
La plataforma estrena la cinta rumana con Belén Cuesta y Ariadna Gil grabada en un aparcamiento del sur de la ciudad
« ¿Hace falta que te diga que me muero por tener algo contigo? ¿Es que no te has dado cuenta de lo mucho que me cuesta ser tu amigo?». El vigilante del aparcamiento de coches está enganchado a un bolero de Andrés Calamaro : Adrián canturrea desde la puerta de su caravana cuando ya se ha enganchado también y de un modo incurable a María. Él es un inmigrante rumano con vocación de poeta y que se gana la vida (mal: 30o euros al mes) como guarda de un depósito de vehículos junto a la Ronda de Córdoba . Ella (a la que da vida Belen Cuesta ), una mujer casada (mal: su marido la deja indiferente) que tiene una banda de música en la que toca el bajo.
Las cosas de la vida: ella y él se enamoran, acaban por irse a vivir juntos (mal: en una caranava del descampado de las afueras de Córdoba). Él sigue escribiendo cuando su jefe -que se llama Rafa y que hace peroles en una parcela- se lo permite. Ariadna Gil cierra el círculo de la historia: es la pareja de Rafa, un hombre arruinado, soberbio y que pierde las formas con facilidad.
«Parking» es el título de la película que dirigió en 2019 el rumano Tudor Giurgiu y que tiene a Córdoba por su principal localización. Cierto es que la ciudad sale más bien poco, porque la acción se sitúa en un aparcamiento al sur de la capital, junto a la circunvalación. Poco, pero sale: por momentos el espectador ve el Puente de Andalucía iluminado, los jardines del Alcázar de los Reyes Cristianos , la torre de la Malmuerta y el Puente Romano .
«Aquí estoy, en la Córdoba de las Tres Culturas, todas ellas moribundas», anota el protagonista en su diario
Estrenada el pasado fin de semana en la plataforma Filmin ante el cierre de los cines por la crisis del coronavirus , en la película brilla la bonhomía y el buen corazón del protagonista, que interpreta Mihai Smarandache : se trata de un hombre idealista que encuentra en la pluma y en el papel el escape a un mundo que no le trata bien... hasta que en su vida se cruza la chica que encarna Belén Cuesta y todo cobra sentido de nuevo.
Adrián calma sus ganas de vivir en los brazos de la mujer de la que se enamora perdidamente. Y sigue escribiendo en su compañía: «El misterio está en las cosas que no se dicen», «aquí estoy, en la Córdoba de las Tres Culturas , todas ellas moribundas», anota en su libreta mientras de fondo suena de nuevo el bolero de El Cantante : «No quisiera yo morirme sin tener algo contigo».