EXPOSICIÓN
Pablo M. Díez lleva a Lucena la mirada de los niños de Asia
El corresponsal de ABC en el continente ha recogido imágenes de su paso por varios países
La Casa de los Mora de Lucena acoge hasta el próximo 16 de septiembre la exposición «Asia: mirando al futuro» , del periodista cordobés Pablo M. Díez , corresponsal de ABC en el continente asiático desde hace 13 años. La muestra gráfica quedó inaugurada este viernes en el antiguo convento lucentino, en una sesión que también sirvió como marco para la presentación de su novela, «Fukushima mon amour» .
La exposición, según el autor «tiene entre sus finalidades la de acercar al espectador la visión de los niños y niñas orientales sobre el mundo que les rodea, una visión paradójicamente optimista». El periodista cordobés señaló ayer que la finalidad de su obra es «mostrar el futuro de este continente asiático a través de los ojos de sus niños». Así, sus fotos reflejan sentimientos complejos y diversos: la inocencia , el optimismo , el cariño… pero sobre todo «la pureza de la infancia ante el incierto devenir que les espera».
Esperanza
«Es un recorrido por trece años como corresponsal a través de la mirada de los niños de países como Birmania , Nepal , India , Mongolia o China , entre otros», señaló Díez, que destaca la capacidad de los pequeños para sobreponerse a un entorno desolador. «He querido reflejar como los niños son capaces de mantener la sonrisa incluso en un campo de refugiado ‘rohinya’ entre Bangladesh y Birmania, en medio de revoluciones, guerras o dictaduras brutales como la de Corea», añadió.
En cuanto al libro, «Fukushima mon amour» combina una apasionada aventura con la propia experiencia profesional de Díez como reportero encargado de la cobertura del tsunami de Japón y el desastre nuclear de esta ciudad nipona. El libro, publicado por Kailas Editorial y escrito con el estilo del reporterismo mezclado con la narración novelesca , narra el surrealista romance de un periodista occidental con una mujer japonesa que, desencantada con su matrimonio, abre los ojos a su triste realidad.