Opinión Córdoba

Sólo pedimos ejemplo y responsabilidad

En esta dura pandemia nuestros políticos no son ejemplo para nadie, ni para los españoles ni para quienes nos ven fuera

El alcalde de Córdoba, José María Bellido (PP), junto a la primera teniente alcalde, Isabel Albás (Cs) Valerio Bellido
José Luque

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Se atribuye al dramaturgo ruso Nikolái Vasílievich Gógol la frase «el ejemplo tiene más fuerza que las reglas». A los actuales gobernantes de España esta verdad les importa tres pepinos. Producen leyes que obligan a los demás, mientras ellos se las pasan por el arco del triunfo pensando que eso de exigir ejemplaridad a los políticos no es propio de demócratas. ¡Vamos! que exigirles a ellos el cumplimiento de las leyes es cosa de «fachas» o «antisistema». Conociendo el poquísimo respeto que tienen hacia aquellas decisiones judiciales que no les satisfacen o hacia quienes imparten justicia comprenderán lo que digo.

Consecuentemente la mayor preocupación de la sociedad española en estos momentos son los políticos . Alguien ha dicho que los actuales son los peores que España ha tenido en los últimos cuarenta años. Estoy totalmente de acuerdo. Cuando estamos pasando una grave pandemia y entrando en una crisis económica de consecuencias incalculables, nuestra clase política es incapaz de ser ejemplo para nadie. Ni para los españoles ni para quienes nos miran allende nuestras fronteras. No quiero generalizar. Todos los políticos no son iguales. Pero no tenemos en quien agarrarnos para decir ¡ese es el ejemplo! De ahí la gran preocupación de la sociedad española. ¡Vayamos al detalle!

Estaremos de acuerdo en que el ayuntamiento es la administración más cercana. El ejemplo de quienes la gobiernan llega a los ciudadanos de manera directa e inmediata. De ahí su responsabilidad en el prestigio de los políticos. No es razonable decir que otros con mayores responsabilidades son los culpables del desprestigio. Primero hay que ser exigentes con los que tenemos cerca. Después, con todos los que en cualquier puesto de cualquier administración nos representan o administran.

El sábado pasado, en este diario, Rafael Díaz Vieito en su columna titulada «Pagar por heredar (años 2)» traía a la memoria las palabras del alcalde Bellido cuando, en referencia a la plusvalía municipal con ocasión de las herencias , decía que «es un impuesto injusto cuando afecta a familias. Es injusto porque ese patrimonio ya lo ha estado pagando la familia en impuestos». Qué bonitas palabras dichas por el aspirante. Pero cuando al frente de la administración municipal, por segundo año consecutivo mantiene un impuesto que según sus palabras, con las que estoy de acuerdo y que en su día elogié, es un impuesto injusto, esas bonitas palabras se transforman en un búmeran que va directamente a destrozar su credibilidad , dañando el prestigio de la clase política y el del partido que representa, deteriorando la confianza de quienes confiando en sus palabras de campaña le votamos . Si de verdad queremos que los políticos dejen de ser una preocupación, no debemos callar.

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