Cultura
Noche flamenca de lujo en el Festival de Puente Genil
El Pele y Julián Estrada fueron algunos de los artistas que participaron en el evento
Mucho cante en la 52 edición del Festival de Cante Grande «Fosforito» de Puente Genil , que reunió a más de 1.300 aficionados sobre las tablas del colegio Agustín Rodríguez, en una noche que gozó de la presencia del maestro Fosforito, que a sus 86 años permaneció atento al cante, toque y cante de una noche dedicada al cantaor pontanés Manuel Jiménez Rejano . El evento arrancó con una emotiva dedicatoria desde Cataluña al homenajeado a título póstumo: unas palabras del cantaor Miguel Poveda.
Rocío Luna , ganadora del concurso de cante flamenco Membrillo de Oro 2018, junto a Ángel Mata al toque, no sólo rompió el hielo sino que con talento y maestría a pesar de contar con tan sólo 19 años, se hizo con buenas críticas . Hubo cantes, tientos, tangos, bulerías y fandangos y no le faltó la soleá polá. Tras ella, el poderío de un Julián Estrada , en su línea interpretativa, que hizo guiños durante su actuación a Jiménez Rejano y cantó coplas nuevas, del gusto de los aficionados. Estrada bordó algunos de los palos que interpretó como la farruca, soleá, cantiñas, bulerías, tangos y fandangos de Huelva. Terminó cantando a pulmón , acercándose aún más a un público que le despidió en pie.
Increíble estuvo Manuel Silveria a la guitarra y Jesús Zarrías , quienes le acompañaron en una magnífica actuación. La Macanita aportó el cante gitano de Jerez. Acompañada de Antonio Higuero cantó por alegrías, soleares, fandangos y tangos, entre otros.
Rafael del Pino «Keko» , que hace dieciocho años estuvo en este mismo festival, tuvo una gran actuación. Estuvo acompañado por un cuadro integrado por Alejandro Hurtado y Manuel Martínez a la guitarra, Miguel del Pino y Carmen García al cante , Carlos Jurado en la percusión, y Richard Gutiérrez y Cristina Tapia. Interpretaron tarantos, alegrías y tangos dando un espectáculo distinto con fuerza y conjunción.
El festival tuvo un potente acento cordobés y muestra clara de ello la puso Manuel Moreno Maya «El Pele» , torrente de arte y originalidad, en una noche que estuvo muy entregado junto a su grupo con violín, y acompañado del guitarrista el Niño Seve . Muchos entendidos coincidieron en que tuvo una noche sublime.
Y cerró Pedro «El Granaíno» , que dio la talla, poniendo el broche a esta edición. Está siendo uno de los cantaores más reclamados en todos los festivales. Junto a la guitarra de Patrocinio hijo , interpretó tientos de leyenda soleá y fandangos. Demostró por qué está en plenitud artística. Se dejó el alma hasta pasadas las cuatro y media de la madrugada con sus soleás, tientos, seguiriyas.