No molesten, deben estar trabajando

El PP, Ciudadanos y UCOR le forzaron al cogobierno PSOE-IU un Pleno extraordinario para saber en qué situación están las grandes iniciativas heredadas de los populares -el bipartito ha pulverizado o paralizado muchas de ellas-. Querían igualmente que los actuales responsables de Capitulares informaran de los proyectos de ciudad que desarrollarán. Pero, de la cita del lunes, lo único que se llevaron fue la sonrisa que les provocó la portavoz socialista, Carmen González, cuando les espetó: «Díganme, un proyecto que hayamos parado, más allá de la Ciudad Deportiva del Córdoba CF».

Ningún concejal quiso comerse el escaso tiempo de que disponía parodiando esa fantástica escena de «La vida de Brian» en la que los judíos se preguntaban: «¿Qué han hecho los romanos por nosotros?». Fue una lástima, porque la cosa podía haber quedado así:

-José María Bellido (PP): Perdón, han tumbado el centro comercial previsto en Rabanales 21.

-Carmen González: Sí. Sí. Eso es cierto. Pero, salvo la Ciudad Deportiva y ese centro comercial, ¿qué hemos detenido?

-J. M. B.: Han desechado el gran gimnasio que planificamos en el Pabellón de la Juventud.

-C. G.: De acuerdo. Aparte de la Ciudad Deportiva, el centro comercial de Rabanales 21 y esas instalaciones deportivas, ¿qué hemos frenado?

-J. M. B.: Disculpe, pero igualmente...

Hubiera sido un digno colofón para un Pleno en el que me sorprendió que el cogobierno no aprovechara el guante que le lanzaron para haberse batido en duelo esgrimiendo nuevas armas. Aunque el presupuesto municipal debe estar avanzado e incluirá las iniciativas de peso que impulsará el bipartito con sello propio, no avanzó nada de ellas. Y eso que todo apunta a que dispondrá de un cañón para propulsarlas: 2016, tras las políticas de saneamiento del PP, debe ser el año en el que el Consistorio pueda volver a pedir préstamos para acometer inversiones.

Pero PSOE e IU no estaban por la labor de revelar su planes en un Pleno al que les forzaron a acudir. De hecho, en la única intervención de la alcaldesa, Isabel Ambrosio, marchitó el tono «flower power» que cultiva y sólo le faltó soltarles a PP, Ciudadanos y UCOR un clásico: «No molesten. Estamos trabajando». Por saber qué preparan, mataría. Doblemente. Como periodista, pero también como ciudadano. Porque este cogobierno en cinco meses -excepción hecha del diseño de su plan de rescate ciudadano- ha mostrado una capacidad innata para destrozar o congelar los proyectos heredados del PP. Pero destruir es fácil. Lo que de verdad debe evidenciar es que puede levantar nuevas iniciativas para construir una Córdoba más próspera, con inversiones que estimulen la economía local. Dejo al bipartito en paz. No molesto. Debe estar trabajando. Eso espero. Más nos vale, por nuestro bien.