Cartas a Córdoba
Necesitamos buenas noticias
El premio gordo de la Base no ha sido fruto del azar, sino de una propuesta bien planteada y consensuada
Querida Córdoba: Al enfrentarme al teclado no tengo que plantearme la pregunta mortificante de siempre —¿y de qué escribo hoy?—, pues parece obligado referirse a la Base Logística del Ejército de Tierra , que desde hace ocho días viene desatando alborozados ríos de tinta . Este premio gordo de la lotería administrativa no ha sido fruto del azar, como la Lotería Nacional, sino de una propuesta bien hecha y respaldada por tus instituciones con tu Ayuntamiento pleno al frente. Por esta vez, Córdoba , las autoridades han formado una piña, todos a una, como en Fuente Obejuna , y han respaldado tan importante proyecto, lo que supongo habrá influido en la decisión favorable, cosa no habitual en estos tiempos de estériles divisiones políticas en las que suelen primar los intereses de partido sobre el interés general.
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Ese consenso ejemplar es conveniente aplicarlo a otros asuntos pendientes que permanecen estacionados en vías muertas a causa de la división inoperante de unos políticos que cobran para servirte con eficacia, más allá de intereses electorales cortoplacistas. Así que valga el estimulante ejemplo de la Base para aprender la lección y desatascar con el empuje del consenso —lo que no quiere decir hurtar los legítimos debates— cuantos asuntos permitan seguir avanzando, mucho más en estos tiempos de tanta incertidumbre económica y social con que nos castiga el maldito virus. ¡Estamos tan necesitados de buenas noticias !
«Ahora, paciencia. La elección se ha resuelto con celeridad, pero la Base no será una realidad mañana»
Y ahora, paciencia, Córdoba . La elección se ha resuelto con celeridad, pero la Base no será una realidad mañana mismo; tres años dice tu alcalde, con optimismo. Y ojalá se cumplan las cifras de inversiones y puestos de trabajo que las autoridades barajan como si se tratase de milagroso maná. Todo llegará, pero paciencia. De momento la Base ya tiene nombre, según han publicado los periódicos, aunque creo que es un bautismo precipitado. El nombre de un proyecto de esta envergadura debe pensarse más despacio y elegir uno que brille con luz propia en nuestra Historia , como sería, sin ir más lejos, el Gran Capitán . Un gran nombre para una gran base. (Por cierto, ¿para cuándo un nombre para tu Estación , que fue otra obra importante y sigue innominada veintiséis años después de su inauguración?). Con la obtención de la Base parece que también te quitas la espina de aquella amarga derrota que sufriste en junio de 2011 , Córdoba , cuando San Sebastián te arrebató una victoria cantada como Capital Cultural Europea . Aquel fracaso dejó una secuela de pesimismo que frustró proyectos y apagó entusiasmos, pero la victoria de ahora —aunque Capitalidad Cultural efímera y Base Logística permanente no sean equiparables— es una inyección de optimismo y de fe en ti misma, Córdoba , que tus gobernantes deben aprovechar para apostar por un futuro que está por escribir. Lo dicho, todos a una .
