Un millón perdido y cero culpables

La edil de Infraestructuras, Amparo Pernichi (IU), compareció el lunes para explicar que el Ayuntamiento dejará de ingresar un millón del Gobierno central por no ejecutar a tiempo obras en los barrios. Tras una autocrítica de postureo, recurrió a un clásico: «No quiero buscar culpables». ¡Claro! ¡Qué desagradable y violento sería averiguar qué ha pasado! Si es necesario que alguien se abrase con la patata caliente , pues se responsabiliza a… el Ejecutivo de Rajoy -seguro que la comisión municipal de los actos del centenario del nacimiento de Manolete hará oficial en breve que la Administración central del PP fue el toro que lo mató-. Le achacó haber demorado allá por primavera la firma del convenio por el que daría hasta 2,5 millones para actuaciones en los distritos. Si esto fue tan determinante, no entiendo por qué Pernichi no lo ha denunciado con fuerza un día tras otro.

Cuando este plan de obras arrancó a primeros de octubre, no ofreció otro de los argumentos que da ahora para palmar un millón: que el departamento de Gestión (PSOE), el responsable de materializar los contratos, se topó con un cambio de normativa y con la falta de personal. Si es así, ¿no averiguará el cogobierno PSOE-IU cómo una modificación de legislación nos salió tan cara? ¿No nos explicará cuántos trabajadores necesita esta área? ¿No nos aclarará por qué en 2015 sí logró justificar otros 2,5 millones llegados de Madrid para el mismo fin, según se vanaglorió el bipartito ? Sería bueno descubrir qué falló: los políticos; los empleados municipales; ambos; el Gobierno central -si es esto último, que lo demuestren- o saber si es un problema estructural.

Escribo esto más que nada porque la UE nos ha dado 15 millones para desarrollar proyectos de 2017 a 2022 y los precedentes asustan. El anterior gobierno local, del PP, hizo una brillante gestión al rubricar en junio de 2014 con la Junta un plan turístico de cinco millones (el 60% lo ponía el Ejecutivo regional y el 40% restante, el Consistorio). Los populares luego se adelantaron a lo del «mannequin challenge» y PSOE e IU tuvieron que pedir este año una prórroga.

Peor nos fue con el « Urban Sur », iniciativa para revitalizar los barrios al otro lado del río. Certificamos a finales de 2015 la pérdida de algo más de 2,4 millones de fondos europeos por no ejecutar las actuaciones a tiempo. Sólo tuvimos, para acometerlas, siete años, en los que gobernaron izquierda y derecha . Ni unos ni otros reconocerán nunca que tienen su cuota de responsabilidad en semejante fracaso. Les es más fácil fingir un combate en el que se carga el muerto al contrincante. Aunque en realidad no se hace sangre al rival cuando pierde fondos públicos, para que el adversario tampoco te toque a ti la cara cuando te pase lo mismo -si se pide o se abre una investigación sobre el millón perdido, me como el artículo, con patatas; eso sí-. Es un tongo y los últimos en buscar culpables serán los que pactan el amaño.