Marisa y Olga Gutiérrez Cano, moda por vía hereditaria

La discreción deja la fecha de nacimiento en una saludable nebulosa, mas no hay duda de que se trata de dos mujeres que pertenecen a la generación que pisa decidida a la conquista de un futuro próspero y esperanzador. Marisa y Olga Gutiérrez Cano son hijas de Matilde Cano , una de las firmas de diseño de moda de más trayectoria y prestigio de la ciudad. Comparten responsabilidad en la empresa que fundó su madre. «Nosotras crecimos rodeadas de hilos, agujas, esbozos y bocetos... Y ahora somos las directoras creativas de la firma . Nuestra tarea no puede ser más ilusionante», afirma Marisa, la mayor de las dos vástagas de la modista cordobesa de referencia que inició su andadura cuando mediaba la década de los setenta del siglo pasado.

«Las dos somos personas muy disfrutonas, no nos conformamos con poco, y nos resulta fácil divertirnos por muy duro que pueda resultar el trabajo . También nos encanta viajar y diseñar, además de participar en desfiles y contentar a nuestras clientes», añaden de entrada estas dos mujeres, que ni siquiera habían nacido cuando Matilde puso el pie en el mundo de la moda. «Ella empezó dando clases en diferentes colegios e instituciones cordobesas para personas que querían dedicarse a coser y a hacer diseños profesionales. En esa primera época fue decisiva su estancia en Barcelona , donde trabajaba mi padre, y tomó contacto con la confección ‘prêt-à-porter’ y descubrió además un mundo muy diferente al que ella veía en Córdoba, mucho más avanzado en el que era posible fabricar de un solo modelo muchas tiradas con muchas más prendas», relata Marisa, que nació justamente en ese periodo catalán de sus padres.

Olga ya vino al mundo en Córdoba, cuando sus padres implantaban en la provincia el modelo de negocio que habían visto en Cataluña. «La firma la fundaron los dos, mi padre y mi madre , él con una clarísima visión empresarial y ella con un arte creativo que esperemos que nosotras heredemos. Mi hermana Olga ya nació aquí en Córdoba. Ella estudió en El Encinar y estudió empresariales mientras que yo me especialicé en el diseño de moda», agrega la primogénita.

Toma la palabra la menor de las dos hermanas. «Mi madre siempre nos ha hecho muy partícipes de sus proyectos e incluso nos pedía ideas y críticas sobre las cosas que tenía en marcha y algunas las tenía en cuenta. Todo ese bagaje nos sirve en estos momentos para ocuparnos de la dirección creativa, y eso incluye no solo la parte de diseño de colecciones, sino pues todo lo que es el control de la estética que Matilde Cano transmite al mundo. Y ahí hay muchísimos apartados y muchísimos matices que van desde las redes sociales, al gabinete de prensa pasando por el cuidado de los detalles de nuestros puntos de venta», afirma Olga Gutiérrez Cano.

¿Y qué aporta la moda cordobesa a un sector tan globalizado y pujante? «Aquí todas las tendencias se mueven a una velocidad supersónica : todo lo que hoy se lleva en París mañana en moda aquí. Y nuestra firma lleva muchos años internacionalizando nuestras colecciones : estamos presentes en Francia, en Italia, en Irlanda, en Lationamérica, en países de Oriente Medio. Córdoba siempre está presente en nuestras colecciones, porque en esta tierra tenemos una forma diferente de crear, hay una luz especial », coinciden las dos entrevistadas.

«Enamoradas» confesas de la ciudad en la que viven lamentan a veces tener que hacer tantos kilómetros para ver «ciudades que son mucho más feas». «A nosotros lo que nos gusta es presumir de Córdoba ante nuestros clientes» , bromean muy en serio.