Desde mi rincón
Falta educación y autoridad
Sobran fotos, palabras y carteles: el Patriarca está lleno de basura
Toda columna es una opinión subjetiva. Se podrá estar de acuerdo o no con ella. Pero no sería razonable ni democrático que por no coincidir con esa opinión se descalifique al mensajero, o, si es político el que la rechaza, que califique como oposición política lo que sólo es participación democrática. Dicho esto, ¡al grano!
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El pasado 25 de junio el alcalde Bellido y el delegado de Urbanismo Fuentes , anuncian a bombo y platillo la puesta en valor y recuperación del Parque el Patriarca. Los ciudadanos imaginábamos que tendrían todo dispuesto y preparado para iniciar lo que con tanta solemnidad anunciaban. Máxime cuando un cartel ya lo denomina Patrimonio Natural de Córdoba . Tres meses después y desde esta columna , a juzgar por lo que estaba a la vista de todos, puse en duda la capacidad de los responsables municipales para ejecutar y conservar el prometido parque. Ante el éxito de mi denuncia, vuelvo de nuevo sobre el tema.
«No puedo dejar de denunciar la incapacidad manifiesta de nuestras autoridades políticas para hacer cumplir las normas»
No es suciedad lo que hay en el Parque el Patriarca . Si tardan mucho en meterle mano, Córdoba va a tener como Patrimonio Natural un estercolero. Basura por todas partes, coches y motos por los caminos, señales de haber hecho fuego y daño a los árboles para obtener leña. ¿De quién es la culpa? No soy nadie para responsabilizar a nadie. Pero cualquiera que pasee esa finca puede resolver con razón que en la sociedad cordobesa hay una enorme falta de educación, un desprecio a lo que tanto ha costado a la ciudad y un insulto a quienes la pasean. Pero no puedo dejar de denunciar la incapacidad manifiesta de nuestras autoridades políticas para hacer cumplir las normas. Sobran fotos, palabras y carteles y falta gestión y autoridad.
El haber sido designados para albergar la Base Logística del Ejército nos obliga a ser más exigentes con la imagen de Córdoba . Si los ciudadanos somos incapaces de corregir esa falta de educación, consecuencia de posibles insuficiencias educativas, los responsables políticos de la ciudad deberían autoexigirse un ejercicio de la autoridad más eficaz, para de esa manera conservar el patrimonio de Córdoba como Córdoba merece.