Solidaridad
Guerra Rusia-Ucrania | Convoyes de 8.000 kilómetros desde Córdoba para ayudar a los refugiados
La compañía de autobuses Pérez Cubero prevé enviar un transporte semanal con material hasta la frontera entre Polonia y Ucrania que volverá repleto de refugiados
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Poco a poco, las asociaciones y colectivos empiezan a organizarse para hacer llegar a la frontera con Ucrania toda la ayuda humanitaria entregada por la sociedad cordobesa a quienes huyen de la guerra. La logística necesaria para canalizar esa solidaridad es uno de los mayores retos a los que se enfrentan las organizaciones.
No basta con entregar paquetes de alimentos, medicinas, ropa y otros enseres. Después hay que llevarlos hasta la frontera con Ucrania, principalmente en Polonia. Y eso no es fácil. Para ayudar en esa tarea, la empresa de autobuses cordobesa Pérez Cubero ha organizado ya dos convoyes. El primero partió el viernes pasado y está ya de vuelta -este martes se encontraba en Francia-; el segundo ha salido de Córdoba en esta misma jornada.
Nicolás Pérez , gerente de la compañía, explica que el transporte de la ayuda humanitaria recibida desde diferentes colectivos se realiza con autobuses y conductores de la propia empresa. Son trayectos muy costosos -más aún con el precio actual de los combustibles- que se demoran en torno a una semana entre la ida y la vuelta, por lo que los gastos se asumen entre todas las asociaciones implicadas.
El primer autobús entregó su mercancía en la frontera entre Polonia y Ucrania y está de vuelta «cargado de gente, casi todo mujeres y niños» . En la ida se tardan tres o cuatro días y en volver algo más, ya que el autobús debe hacer más paradas para que descansen los pequeños y sus familias de un viaje tan largo (hay más de 4.000 kilómetros por carretera). Está previsto que ese transporte llegue a Málaga, donde se organizó la singladura, el miércoles a última hora o el viernes a primera. Es decir, toda una semana.
«Quiero ir hasta allí para ver cómo podemos mejorar en el proceso de ida y vuelta»
Nicolás Pérez
Gerente de Pérez Cubero
La empresa Pérez Cubero pretende disponer de un convoy humanitario cada semana al menos en las dos próximas. Para mejorar la logística, el propio gerente viajará hasta Polonia en el autobús que sale hoy. «Quiero ir hasta allí para ver cómo está la situación y saber qué podemos mejorar en el proceso de ida y vuelta», afirma Nicolás Pérez.
Lo que se va a encontrar allí, tal como registra un vídeo grabado por el chófer de Pérez Cubero que llegó a la frontera la semana, es una situación caótica . La ayuda humanitaria es ingente, con toneladas y toneladas de todo tipo de productos que se acumulan a la espera de poder distribuirla en condiciones. Se ven alimentos, papel higiénico, colchones, cientos de bolsas de ropa y hasta muletas. Serán las organizaciones internacionales o la propia Polonia quien deba organizar la logística del reparto de todo ese material.
Pérez Cubero aprovecha el viaje de retorno para ocupar todas sus plazas (55 en un autobús convencional) con personas que huyen de la guerra. El primer transporte llegará hasta Málaga , donde la coordinación con la Subdelegación del Gobierno permite la llegada de los refugiados para permanecer con familias de acogida. En el destino hay que gestionar la documentación, la acogida o la escolarización de los menores, entre otras cuestiones.
En los siguientes viajes, según ha explicado Nicolás Pérez, probablemente el destino final de los exiliados ucranianos será Córdoba , ya que esos trayectos sí han estado coordinados desde aquí y ya existen familias de acogida. Así se lo han hecho saber desde la Subdelegación del Gobierno en Córdoba, según el testimonio del gerente de la empresa.
También desde Espiel
Otra iniciativa similar es la que ha tomado José Luis Martínez, un vecino de Espiel que decidió por su cuenta viajar hasta la frontera de la zona bélica para llevar ayuda humanitaria. Desde el Ayuntamiento organizaron la recogida, según explica el alcalde de la localidad, José Antonio Fernández, y decidieron enviar únicamente medicamentos.
«Hicimos un llamamiento y la respuesta ha sido tremenda»
José Antonio Fernández
Alcalde de Espiel
«Hicimos un llamamiento y la respuesta ha sido tremenda», ha explicado Fernández. El Consistorio ha aportado una furgoneta municipal y corre con los gastos de gasolina y de alojamiento, mientras que una familia de la localidad se ha hecho cargo de pagar la manutención .
José Luis Martínez ya ha entregado el envío espeleño de medicinas y fármacos hasta Ucrania y está de vuelta. Lo hace, como los autobuses de Pérez Cubero, con el vehículo cargado de refugiados . En este caso son tres mujeres y un niño pequeño , hijo y nieto de dos de las refugiadas que le acompañan y que ahora mismo se encuentran en algún punto entre Alemania y Francia.
La familia no se quedará en Espiel . Una vez arriben, se trasladarán a Córdoba capital, donde serán atendidos por las asociaciones que gestionan la ayuda a los refugiados para que permanezcan con alguna familia de acogida.
También en la jornada de este martes, el grupo de voluntarios ucranianos residentes en Córdoba que está coordinando la ayuda humanitaria tiene previsto enviar otros dos camiones cargados con productos de primera necesidad.
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