VERSO SUELTO
Gestionar es prohibir
IU no podrá parar las licencias turísticas cuando ya soñaba con una Judería vacía de gente
Para entender bien las ideas de algunos de los llamados Ayuntamientos del cambio , que son aquellos que el PSOE entregó a los populistas pensando que se lo devolverían en el Congreso de los Diputados , a veces pienso que deben de tener una tertulia , quizá un grupo de Whatsapp , en el que compartan las propuestas llamativas, las ideas que no tienen contenido pero llenan titulares potentes, las consignas ideológicas que no son sustanciales , pero que aliñan la aburrida ensalada de la gestión. Habría que agradecérselo, por cierto: sin sus ocurrencias, que deben de nacer con una bombilla virtual encendida , la información municipal no pasaría de pólizas de crédito, mociones sobre leyes nacionales y justificación de fondos europeos .
En el grupo de Whatsapp , que quizá los alcaldes y concejales miren cuando haya acabado la jornada para enterarse de las novedades, colgaría cada uno sus hazañas. Manuela Carmena tuvo que haber cosechado muchas palmitas cuando se le ocurrió lo de restringir el tráfico en Madrid y seguro que a Ada Colau le pusieron más de un «gif» de celebración cuando propuso que el 30% de las casas nuevas fuesen viviendas sociales . A Kichi , que ha puesto a la pequeña y bellísima Cádiz en el mapa político, le festejaron mucho las fotos en camisa por fuera al recibir a los mandos, con uniforme de gala, del Juan Sebastián de Elcano , y los teléfonos echaban humo aquel día del verano pasado en que la gente de la CUP propuso expropiar la Catedral de Barcelona y hacer allí un economato. Quien no lo ensalzaba es por estar muerto de envidia de no poder hacer lo mismo.
Con el PSOE aupado a una mayoría tan débil como la que ahora hace que Pedro Sánchez tenga que hacer equilibrios imposibles y distraer con viajes en avión, el de Córdoba es también un Ayuntamiento del cambio que tuvo sus momentos de gloria , como aquel día en que hubo que guardar un minuto de silencio por las víctimas de un bombardeo contra el Estado Islámico . La parte proislamista, que en los grupos a lo mejor saca la patita, prometía oraciones en el Ramadán por la siempre admirada ciudad de Córdoba y su Mezquita .
Con la gente de Ganemos diluida en su Córdoba de empresas públicas de energía, el agente transformador es Izquierda Unida , que en sus 28 años en la Alcaldía nunca tuvo más fervor revolucionario que ahora que sólo tiene cuatro concejales. El grupo, que en estos días anda un poco alicaído por el verano, habrá alucinado con la idea de Urbanismo de suspender todas las licencias para usos turísticos, y que tenía la máscara de frenar el fenómeno de los apartamentos y viviendas pero en realidad iba a paralizar los hoteles nuevos , reaccionarias fuentes de riqueza y empleo privado. La cosa está parada porque Ganemos quiere que sea más dura , quizá para echar a todos los turistas , y los demás, empezando por el PSOE , dicen que ni pensarlo. Será una lástima, porque si hubiera salido adelante habrían presumido cantidad en el grupo, que podría llamarse «Gestionar es prohibir» , de que a Córdoba ya no viajaba nadie, y se habría puesto una foto de la Judería vacía de restaurantes, tiendas de mal gusto y gente en general. Una pena, aunque siempre habría algún gracioso que llegara poniendo pegas: «Esto está muy bien, @Pedro Garcí a, pero lo de echar a la Semana Santa de la Mezquita te está costando».
