Pretérito Imperfecto

Aviso demoscópico

Queda mucho mandato y muchísima faena en Córdoba como para andar con juegos florales

El alcalde de Córdoba, José María Bellido, con la primera teniente de alcalde, Isabel Albás Álvaro Carmona
Francisco Poyato

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La Universidad de Córdoba , que suele meterse poco en política -aparentemente-, nos ha dejado una fotografía demoscópica del panorama electoral y pandémico de la ciudad. Un sondeo que, como casi todos, encierra errores y no debe ser tomado como una verdad absoluta más que el dibujo que hace del aquí y el ahora, y las lecturas siempre interesantes que pueden extraerse de lo que los cordobeses piensan y proyectan hacia su Ayuntamiento . El actual formato de gobernanza, con la coalición de PP y Ciudadanos más el apoyo de investidura de Vox , mantendría el apoyo de los cordobeses con la misma suma de concejales (dieciséis) actual y frente al bloque socialcomunista (PSOE, Izquierda Unida y Podemos) que no lima ninguna diferencia y tendría los mismos ediles (trece). Cabría afirmar, pues, que ni los estragos del coronavirus ni la propia gestión del cogobierno (con claroscuros) dejan mácula. Más al contrario, los electores muestran mayor condescendencia con su Ayuntamiento en la pandemia que con el resto de administraciones. Especialmente, contra el Ejecutivo de Sánchez e Iglesias. Incluso cuando la gran parte de los recortes (y el desgaste) los asume la Junta de Andalucía (horarios, toque de queda o cierres perimetrales...), ésta sale mejor parada que este gobierno de propaganda y mercadeo rupturista.

Los cordobeses siguen teniendo los mismos problemas de siempre (paro y economía) agravados por el desastre del virus. El sondeo deja a Bellido como el político más valorado y conocido -habitual en la política local, aunque no siempre ocurra así-. Hay un aprobado para la gestión de la coalición de populares y Ciudadanos, aunque se aprecia un desgaste en esta formación sin haber llegado aún al ecuador del mandato, ya que perdería dos de los cinco concejales que tiene actualmente e irían a parar a manos del PP y Vox, que igualaría en ediles a los naranajas (y visto el cariz de su oposición, nunca se sabe).

El aviso demoscópico llega en un momento en el que los allegados políticos de Bellido han decidido buscar su espacio propio sabedores de que la figura del alcalde cataliza, para bien y para mal, la gestión. Siempre ocurrió en Capitulares. Aunque puede que no estén eligiendo la mejor forma. Para ello se han puesto a negociar los presupuestos de 2021 con la oposición sin el monopolio de este ejercicio para el responsable de Hacienda. Imagínense que Juan Marín hubiera hecho comandita con la izquierda en Andalucía y le hubiera hecho la cama al consejero del ramo que ha terminado convenciendo a Vox para sacar adelante el segundo presupuesto autonómico. Ítem más. Marín ya adivirtió días atrás que no le importaría acudir en bloque con el PP a las próximas elecciones a la vista de otros sondeos y de que Cs se mantiene en un terreno ambiguo, con la versatilidad que se le ha echado en falta otras veces, pero con menor fuelle y calado en tiempos de polarización.

Queda mucho mandato y muchísima faena en Córdoba , con una oposición que se aferra a cualquier palo para atascar la rueda, como para entretener la energía en juegos florales .

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