El Norte del Sur
Estadio Azteca
Va tardar un poquito que a la hinchada cordobesista le pase lo que le pasa a Calamaro cuando se asoma gigante
PARECE que va a tardar un poquito que a la hinchada cordobesista le pase lo que le pasa a Andrés Calamaro cuando se asoma al EstadioAzteca, tanto de chico como de grande, que ya lo estaba mucho antes.
El descenso del equipo de la ciudad a la cuarta división del fútbol nacional después de 36 años viene a certificar un hecho que ya era evidente desde hacía tiempo: que el Córdoba CF solo da a estas alturas para una crónica de tribunales, porque suficiente han penado los compañeros de Deportes escribiendo de las tragedias en la cancha. Con sus dos propietarios más recientes imputados por un juez por delitos financieros, la última alegría que el club le ha dado a su afición fue en el descuento y es ya remota: ese gol de Uli en el campo de Las Palmas cuando los locales celebraban ya el ascenso que acabaron por llevarse los blanquiverdes. No hay dicha duradera si empieza con una batalla campal , como ocurrió en el estadio Gran Canaria en junio de 2014 .
En seis temporadas el equipo ha pasado de recibir a los multimillonarios con calzonas que juegan en la Champion a estudiar en la pizarra del vestuario la estrategia del Atlético Mancha Real, del San Roque o del filial del Granada . Tampoco hay que sorprenderse demasiado del descenso a los círculos del infierno de las categorías de carreteras secundarias o provinciales: mala cosa cuando una grada de preferencia no es noticia por el trofeo que alza el mejor de los veintidós sino por una lona con el anuncio de una marca de ginebra que le cuesta al club una multa del Ayuntamiento .
Uno, al que el fútbol le emociona solo cuando España se trae el Mundial o cuando el Betis gana en Nervión , no puede dejar de entristecerse por esto que pasó ayer , porque para mucha gente once tipos peleándose por un balón contra otros once es mucho más que un juego. Es el sueño con una tarde de gloria, la afición que le transmitió su padre, el niño desde chico con la camiseta de rayas, la certeza de que comparte con miles de personas una misma pasión de esas que El Cantante dice que no muchos tenemos. Con razón ha suspendido su concierto en el Festival de la Guitarra .