PASARON POR ALLÍ
Elecciones Municipales Córdoba 2019 | Fátima: El hastío máximo de otro barrio más
Pedro García y Alba Doblas prometieron rebajas fiscales para unos autónomos que se sienten «abandonados»
Pedro García continuó su ronda de visita por los barrios cordobeses en la mañana del sábado. La esquina de la Avenida Virgen de Fátima con la calle Arcos de la Frontera fue el lugar escogido para iniciar los últimos siete días de campaña. Su comparecencia sirvió para auto alabarse y alabar la gestión de Hacienda a cargo de Alba Dobla s , la número cuatro de Izquierda Unida para las elecciones del próximo 26 de mayo .
Su exposición fue para defender las inversiones realizadas en la zona de Fátima y de Levante y anunciar que, en caso de ser elegidos, su línea será continuista. Y en ese sentido dicen que apostarán por el empleo explotando al máximo los recursos que permitían bonificaciones fiscales.
Es llamativo como, en un barrio más, las quejas de los vecinos van en la misma sintonía. Una muy alejada de la realidad que pretenden vender. Fue difícil encontrar vecinos que quisieran opinar sobre política. En sus rostros se dibujaba la tristeza y un alma alejada del día a día y de las promesas de los actuales regidores del Ayuntamiento.
Una tendera, que con curiosidad veía a la lejanía a García repartir panfletos mientras fregaba la puerta de su establecimiento, explicó que «este barrio, como tiene pinta de viejo, lo tienen abandonado». Esta misma mujer señaló que «me parece bien que prometan que van a bajar impuestos y que van a mirar por los autónomos. ¿No es lo mismo que dijeron hace cuatro años? No parece que hayan echo mucho , pero espero que quien entre ayude a los autónomos de verdad, que son los que levantan el barrio».
Otro señor, que también se encontraba en la puerta de su negocio en la misma calle donde Pedro García montó su stand, no quiso entrar a valorar la presencia del alcaldable por Izquierda Unida pero sí quiso trasladarle un mensaje: « Que levanten el barrio, que den trabajo y que luchen por dar viviendas para la gente joven ».
Fue la crítica más liviana que quedó registrada de aquel barrio. Un mensaje que constrasta con el que se barruntaba unos metros más abajo. Allí, un matrimonio hablaban sobre el precio de la vivienda en el barrio con otro vecino. Fue mentarle la palabra «política» y sus ojos cambiaron de tamaño. El primero dijo que « está todo bien , aquí han echo cosas, pero han faltado muchas como en todos sitios». No quiso valorar mucho más. Pero su compañero de conversación, conla bolsa del pan en la mano le refutó: « ¿Qué han hecho? El barrio está sucio y por aquí no viene nadie . Ni a limpiar, ni vigilancia ni nada. Anoche mismo había debajo de mi casa unos chavales haciendo de todo y estuve hasta las tantas así».
Y el mitin improvisado de este caballero continuó -y eso que en un primer momento declinó compartir sus pensamientos-. «Los ves hablar por la tele y dicen todos los días que han hecho un montón de cosas. ¡Qué embusteros! ¿No les da vergüenza? ¡No hacen nada! Ni estos ni los otros». Y allí se quedaron los tres, nuevamente hablando sobre el precio de la vivienda.
Y por último, otro vecino, quien también iba a comprar el pan, señaló que «la verdad es que podían limpiar un poquito más ». Y también sugirió que «ahí en el llano de la carcel podían hacer algo para que los niños practiquen deporte porque en el campo del Apademar no pueden, es casi privado ya».
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