Crónicas de Pegoland

El disparate

La forma en la que se ha echado a Ganemos en Común de las municipales no tiene nombre

Asamblea de Ganemos Córdoba Valerio Merino

09/05/2019 a las 08:19h.

Creo poder afirmar, sin temor a equivocarme, que no he estado de acuerdo con buena parte de las propuestas que el grupo municipal de Ganemos Córdoba ha defendido durante estos cuatro años de mandato municipal. A lo escrito me voy a remitir. Sus iniciativas ... siempre me parecieron irrealizables; su táctica política, infantil, y algunas de las decisiones adoptadas, erráticas. Las negociaciones para la conformación de la investidura fueron de un «amateur» inconcebible y la ausencia de garra para condicionar la política del gobierno de PSOE e IU, fuera de lugar. Aún así, y aquí lo quiero dejar escrito, no tiene nombre la forma en la que la lista de Ganemos en Común ha sido expulsada de la carrera electoral en Córdoba . Es una de las mayores cacicadas que se han visto amparadas bajo la estricta aplicación de la normativa vigente. Si la ley no sirve para aplicar el sentido común, no es ley. Es fanfarria.

Como ustedes ya sabrán, el Tribunal Constitucional ha decidido no admitir a trámite el recurso de amparo presentado por esta formación política de su exclusión vía sentencia de un juzgado de lo contencioso administrativo. Era lo previsible. El Tribunal Constitucional no forma parte del Poder Judicial sino que controla que el procedimiento se haya realizado con las cautelas que la Carta Magna dicta. El problema radicó en un muy desgraciado fallo de primera instancia que no tuvo en cuenta algo tan sencillo como la realidad.

Ganemos Córdoba se presentó a los anteriores comicios como una agrupación de electores, no como un partido. Mientras tanto, un particular que no conoce nadie se dedicó a registrar el nombre de Ganemos por muchas ciudades por razones que solo podemos adivinar y que nada tienen que ver con la praxis electoral. Para estas municipales, los impulsores de la tercera fuerza política cordobesa durante estos cuatro años decidieron convertirse en partido al uso, con el nombre de Ganemos en Común Córdoba , con una inscripción totalmente válida y aceptada en el registro correspondiente del Ministerio del Interior .

Los del Ganemos chungo decidieron presentar una lista que no conoce nadie y formada por personas que son familiares. Se ha publicado que por intereses puramente económicos . Para ver si suena la flauta y acceden a los emolumentos que supone tener un grupo municipal aunque sea pequeño. La Junta Electoral decretó, con buen criterio, que esa marca mala tenía que ser descalificada. Un juzgado revisó el caso y consideró que, al haber registrado un nombre similar antes, tenía preferencia . El argumento es absurdo. Como si no pudieran concurrir dos partidos que llevasen la palabra «comunista», «socialista», «andaluz» o «popular» en las papeletas de unos mismos comicios. El contenido del fallo puede ser administrativamente impecable. Pero la vida no son sellos en papel timbrado. Molestarse en realizar una investigación era lo que tocaba. La censura de un partido es cosa del pueblo soberano .

Así, ni se puede, ni se debe.