21 DE FEBRERO DE 2007
Diez años de la tragedia de la calle Palomares en Córdoba
El derrumbe de una casa acabó con la vida de un matrimonio; de los seis imputados sólo uno fue condenado a 4 años
Eran las 08.05 horas del 21 de frebero de 2007 . Poco antes habían comenzado a trabajar las máquinas en la apertura de una zanja para las obras de un solar anexo ubicado en la calle Palomares . En la casa de al lado, en el número 4, el matrimonio formado por Antonio Sánchez García, de 46 años, y Teresa Fernández Murillo, de 43, se encontraba a esas horas durmiendo en la cama sin sospechar que la tragedia se les iba a venir literalmente encima.
La vibración de las obras provocó el derrumbe del muro de su dormitorio y acabó aplastando bajo una auténtica montaña de escombros al matrimonio que dejó dos huérfanos , Mayte y Antonio Sánchez. Diez años han pasado exactamente de aquel suceso en pleno corazón de la Axerquía Norte , que sacudió a la sociedad cordobesa y que siempre se hace presente cada vez que se habla de la posibilidad de que se caiga alguna casa, especialmente las del Casco Histórico cordobés.
Una causa de 3.000 folios
Aquel desastre acabó derivando cinco años más tarde , en 2012, en un juicio en el Juzgado de lo Penal número 1, cuya causa acabó acumulando en ese lustro hasta 3.000 folios , en la que se personaron hasta una decena de abogados y una lista de seis imputados que tuvieron que comparecer ante el juez. Para ellos, el Ministerio Fiscal y tres de las cuatro acusaciones particulares personadas coincidieron al solicitar una pena que ronda los 22 años de prisión por dos delitos de homicidio por imprudencia y un delito contra los derechos de los trabajadores.
Finalmente, únicamente uno de los reos, A. G. C., el encargado de supervisar la obra que causó el desplome doblemente mortal, fue condenado a cuatro años de cárcel, mientras que el conductor de la excavadora que trabajaba en el solar cuando el muro se vino abajo también fue sancionado con una multa de 900 euros . El resto de acusados -el arquitecto, el promotor, el contratista y el arquitecto técnico- fueron absueltos de todos los cargos que se les imputaba.
Lo último que se conoce de esta negra historia es que en 2013, lo dos hijos del matrimonio fallecido, tras estudiar la sentencia, decidieron recurrir el fallo de la Audiencia .
