APUNTES AL MARGEN
Los datos y los prejuicios
Un congreso ha ofrecido luz sobre la situación real de los niños extrajeros no acompañados
Un congreso celebrado esta misma semana en la Facultad de Ciencias de la Educación ha permitido conocer una serie de datos contrastados por fuentes fiables -que en estos tiempos son de agradecer, la verdad- sobre el colectivo conocido con el acrónimo de menas (por menores extranjeros no acompañados ). En tanto no me gusta colaborar a atornillar determinados sambenitos, en este artículo prescindiré de ese concepto para definirlos como lo que son: niños, jóvenes o chavales . En ese contexto académico universitario, se ha conocido un informe de tres expertos en Criminología de la Guardia Civil que han estudiado la tasa de comisión de delitos de este grupo concreto de chicos con la conclusión de que es, según sus propias palabras, « insignificante ».
Ninguno de los 411 niños o jóvenes en estas circunstancias que llegaron a Córdoba en 2018 ha sido acusado de la comisión de un delito grave de los recogidos en el Código Penal. Si se han producido hechos reprochables, según los resultados, han sido faltas de hechos que no han tenido incidencia destacable. El dato del número es relevante. Según las estadísticas, el sesenta por ciento de los chicos que entran en territorio español por vías clandestinas pasa por Córdoba camino de otros destinos . Los inmigrantes, que no son tontos, prefieren instalarse en lugares donde la posibilidad de obtener un empleo es cierta en vez de en sitios donde la tasa de desempleo genera una barrera añadida para ganarse la vida.
En tanto el último cómputo disponible es de 411 chavales, la mayoría con edades que rondan los 16 años de edad, la verdad verdadera es que el número de personas -recuerden, personas- que se encuentran en esta situación supera en trazos gruesos el centenar. La Junta dispone de 194 plazas en centros públicos y concertados. Las que están siendo utilizadas para estos chavales son alrededor de 115, según los datos oficiales publicados por la Consejería de Igualdad de la Junta. En tanto la población actual de la provincia de Córdoba, estamos hablando de un grupo humano que supone el 0,01 por ciento de los vecinos censados.
Los golpes de pecho de los valores cristianos de Europa han de demostrarse con la solidaridad con el pobre
Los profesionales que trabajan directamente en los centros con estos muchachos realizaron algunas advertencias interesantes sobre su situación. Desde la existencia de un número de chicos no controlados en el territorio por los huecos del sistema de bienestar social hasta los problemas que tienen para fijar la edad de unas personas que, al cumplir los 18 años, tienen que enfrentarse a la vida sin sostén alguno .
Una de las cosas que pasan en este mundo moderno, como bien ha dicho el novelista Javier Cercas, es que ya no solo basta con contar la verdad sino que hay que destruir las mentiras . La convocatoria de concentraciones en etapa preelectoral por parte de Vox contra un centro que atiende a estos menores en Lucena y otras ciudades constituyó una forma de sacarle jugo a los peores prejuicios que se encuentran latentes en la sociedad. El del miedo irracional al pobre .
Existe una parte de la sociedad, de la política, que se llena la boca con la inspiración cristiana de Europa , con los valores que han configurado -y es cierto- democracias robustas aunque no exentas de problemas. Esa misma parte de la sociedad, que tantos golpes de pecho se da, debería hacérselo mirar cuando pone en el disparadero a unos niños pobres , que se encuentran en otro país y que bastante drama tienen con hallarse lejos de sus seres queridos.