CORONAVIRUS EN CÓRDOBA
La tercera víctima del coronavirus en Córdoba: un anciano de 96 años que vivía en una residencia
El hombre vivía en la Residencia Municipal e ingresó en el hospital el día 15
![Panorámica del municipio de Torrecampo, en el Valle de los Pedroches](https://s3.abcstatics.com/media/andalucia/2020/03/21/s/torrecampo-corcoba-noticia-kXdC--1248x698@abc.jpg)
El último parte de la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía dejó ayer un balance de tres fallecimientos en la provincia de Córdoba por el Covid-19. A las pérdidas sufridas en Belmez y Montemayor hubo que sumar una tercera que se produjo también en la zona de influencia del Área Sanitaria Norte, aunque en esta ocasión en el fallecido se encontraba ingresado en el Hospital Comarcal Valle de Los Pedroches , según confirmaron a ABC autoridades sanitarias. Se trata, concretamente, de un hombre de 96 años de Torrecampo que sufría patologías previas.
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El fallecido se encontraba interno en la Residencia Municipal de Torrecampo y debido a su edad avanzada presentaba problemas de salud, aunque posteriormente dio positivo en las pruebas de coronavirus. El hombre ingresó en el centro hospitalario pozoalbense el pasado 15 de marzo y falleció en la jornada del viernes, convirtiéndose así en la tercera víctima mortal de la provincia por coronavirus. El origen del contagio podría estar en la visita de un familiar procedente de una de las zonas de riesgo de esta crisis sanitaria. «Es verdad que era una persona muy mayor, que estaba malito, pero esto lo ha acelerado todo. Tenía nueve hijos, casi todos viven fuera de la comarca», explicaba una vecina de la localidad.
Contacto con el fallecido
El positivo por Covid-19 dio pie al establecimiento de los correspondientes protocolos en la residencia de mayores de esta localidad de Los Pedroches y los profesionales que estuvieron en contacto con el fallecido están pasando los días preceptivos de cuarentena en sus casas para evitar otros posibles contagios, aunque por el momento no se han registrado más positivos. Además, se han llevado a cabo las tareas de desinfección pertinentes siguiendo los protocolos establecidos.
A este respecto, el Ayuntamiento de Torrecampo fue uno de los primeros de la zona que tomó decisiones más severas, cuando aún no se había decretado el estado de alarma, para prevenir posibles contagios. En este contexto, y ante la aparición de casos en la localidad, se hizo un llamamiento para que no se visitara, principalmente, a las personas mayores. «Estamos desinfectando las calles, los parques y los jardines como medida de prevención de la propagación del virus y en la Residencia se están siguiendo todos los protocolos que se establecen desde el Ministerio y la Consejería», detalló la alcaldesa del municipio, Francisca Alamillo.
Preocupación
Como en otros tantos municipios, la preocupación en Torrecampo es latente y la aparición de al menos un caso en la localidad ha provocado que sus vecinos se conciencien y sigan las medidas de seguridad impuestas con la declaración del estado de alarma. «Yo creo que nos lo hemos tomado bastante en serio, tan solo se ve gente en la calle para hacer la compra o para sacar al perro, pero solo para que hagan sus necesidades y vuelta a casa», apunta una vecina. Esa preocupación también se extiende a las familias cuyos padres, madres o abuelos se encuentran en la residencia. «Estamos preocupados, pero como todo el pueblo, pero sabemos que se están tomando las medidas de seguridad oportunas y podemos llamarlos para que nos cuenten cómo han pasado el día, si han comido y cómo están», afirma una vecina que tiene a su abuela en la residencia municipal de la localidad.
Y es que al igual que relataban vecinos de Belmez tras conocerse la muerte de un hombre del municipio, la preocupación en los pueblos de la comarca de Los Pedroches crece si se tiene en cuenta el alto grado de envejecimiento de la población. Por ese motivo, los alcaldes y responsables de las residencias han establecido severos protocolos e n los centros de mayores, un foco de alto riesgo por la incidencia del virus en las personas mayores, que suelen además presentar patologías previas.