Coronavirus Córdoba
Lucena prorroga siete días más el «toque de queda» a las 19.00 horas
La medida, acogida con normalidad, ayuda a reducir contagios, según el Ayuntamiento
Incidencias y restricciones en cada municipio de Córdoba
Los lucentinos se han ido acostumbrando a ser noticia a nivel nacional desde el inicio de la pandemia. El de Lucena fue el primer ayuntamiento en pedir a la Junta de Andalucía un toque de queda nocturno cuando todavía no se hablaba de esa posibilidad y pionero en acoger un cribado masivo con test de antígenos. Además, las cámaras de todas las cadenas han pasado por las fábricas de frío de la ciudad para dar cuenta de su capacidad para generar purificadores de aire o supercongeladores para conservar las vacunas del Covid .
El último desfile de medios ha llegado a cuenta del decreto de Alcaldía que hace diez días limitaba la capacidad de los ciudadanos para «permanecer y concentrarse —no de transitar— en la vía pública —calles, plazas, parques, jardines y similares—, entre las 19:00 horas y las 6:00 horas de la mañana siguiente. Pues bien, lejos de arredrarse ante las críticas, el consistorio lucentino prorrogó ayer dicha medida junto al resto de las contenidas en el polémico decreto.
Y es que la medida ha sido acogida con normalidad por el vecindario. No en vano ya había formado parte de otros decretos previos en el mes de septiembre, aunque en aquella ocasión la prohibición se iniciaba a las 22:00 horas e incluso implicaba el cierre de las terrazas de los bares establecidos en dichas zonas, pese a no existir en ese momento toque de queda y estar decretado el cierre de estos establecimientos una hora más tarde. De hecho, según la información hecha pública por la Policía Local , durante la semana pasada no se formuló ninguna denuncia ni actuación concreta relacionada con el incumplimiento de la medida.
Lo sorprendente para la mayoría de los lucentinos ha sido la controversia que la medida ha desatado a nivel nacional, al considerarse la misma como una limitación de los derechos fundamentales y difundirse la idea de que el decreto prohibe a los ciudadanos «parar» en la calle desde las siete de la tarde.
Un decreto prohíbe las concentraciones de cuatro personas en la calle y en las puertas de los bares
E l alcalde de Lucena, Juan Pérez (PSOE), señaló ayer que la decisión se enmarca en la política municipal de apostar por la adopción de diferentes medidas que, «desde el equipo de gobierno y la Junta de Portavoces entendemos que pueden ayudar a mejorar la situación sanitaria de la ciudad o, al menos, a paliar sus consecuencias».
El decreto de la semana pasada fue acordado también con este objetivo y aprobado unánimemente por todos los grupos políticos municipales – PSOE, PP, Ciudadanos, Vox e IU – .
«En mi opinión, considero que en Lucena se ha entendido perfectamente la medida en el marco de evitar concentraciones en espacios públicos a partir de las 7 de la tarde», apuntó el regidor lucentino. Y añadió que «nadie en Lucena , incluyendo personal sanitario y Fuerzas y Cuerpos de Seguridad , la ha cuestionado en el sentido de considerarla desproporcionada, sino todo lo contrario», por lo que resulta difícil entender el revuelo mediático que ha ocasionado, más aún cuando la misma ha contado con el beneplácito de los servicios jurídicos municipales, que en última instancia han de validar los decretos.
El sentido común
Asegura el regidor que «tratamos de aplicar el sentido común en la adopción y aplicación de medidas y ésta ha de entenderse en ese contexto, procurando sensibilizar en la lucha contra la pandemia», más allá de las interpretaciones extremas que algunos medios han hecho de esta medida.
Lo cierto es que hace diez días, cuando la controvertida decisión apareció publicada en un decreto de Alcaldía, Lucena estaba literalmente a una décima del cierre de su actividad comercial no esencial y de la hostelería, tras sumar 999,9 casos por cien mil habitantes en 14 días, mientras que ayer, su tasa de contagios había caído hasta los 697 puntos.
Las medidas de Lucena han calado entre los regidores de los municipios más afectados y ayer mismo, la alcaldesa de Moriles, Francisca Carmona (PSOE) , dictaba un decreto prohibiendo las concentraciones de cuatro personas en la vía pública, así como las reuniones en las puertas de los bares.