Franciso J. Poyato - PRETÉRITO IMPERFECTO
Córdoba, ciudad de experimentos
Si quieren adelantarse a la ciudad que está por llegar, leánse las 51 imposiciones de Ganemos
![Los concejales de Ganemos Córdoba, en un pleno del Ayuntamiento](https://s3.abcstatics.com/media/andalucia/2016/01/31/s/opinion-francisco-poyato--620x349.jpg)
Si es usted heterosexual y padre, mejor vaya tentándose las ropas. El programa de gobierno del Ayuntamiento de Córdoba , esto es, las 51 medidas de Ganemos, la marca de Podemos, a las que da obligado cumplimiento la alcaldesa María Isabel Ambrosio en aras a una ciudad un poquito menos libre y, sobre todo, muy, muy moderada, incluye en su punto G (tal cual) la siguiente acción: «Potenciar medidas que luchen contra el heteropatriarcado ». Desconocemos el momento del mandato en que la citada medida se llevará a efecto, o si al menos, alguna comisión nos proporcionará a los afectados algún tipo de gracia perentoria que nos permita expiar nuestra condición de manera honrosa . Y, por supuesto, pedir disculpas por ella.
No, no se ría. Es tan verídico como inverosímil. Es el mismo documento sagrado en el que se recoge «garantizar que se erradique el maltrato animal de la ciudad». O el que reclama «la titularidad pública de la Mezquita-Catedral y de todos aquellos bienes de uso público usurpados». O el que pone el acento en el «impulso del carácter laico y la aconfesionalidad del Ayuntamiento», eliminándose la «obligatoriedad de la presencia de la institución municipal en manifestaciones religiosas oficiales». O el mismo que con imperativo y reflexivo adjunta: «Se suministrará agua al Rey Heredia y se retirarán los cargos a los activistas, impulsando la cesión prevista y apoyando la iniciativa». Aaarrrrr¡¡¡ Todo ello ha sido puesto en marcha, en un meritorio ejemplo de eficacia política por parte de nuestra primera autoridad. Reitero, siempre desde la moderación, el sentido común, el diálogo, la claridad y el respeto a todos (?).
Entre las excusas con las que la regidora ha querido revestir la puya al mundo del toro ha esgrimido esta semana, en un alarde de sinceridad que le agradecemos, que daba cumplimiento al último punto del tratado sobre cómo gobernar Córdoba sin ser radical , vulgo imposiciones de Ganemos. Eso después de su ejercicio de fe ciega en las mociones que sólo hablan del circo y Ángel Cristo. El rigor antitaurino para la gestión de los fondos municipales es un tupido velo más. En ese afán de contable con manguitos que le ha entrado a nuestra señora alcaldesa, no cabría pues entender por qué se pagan hasta p eroles caldosos en la barriada de Santa Cruz . Aunque sea un afición loable de algunos, claro está. O jornadas participativas en las que se pone como ejemplo y modelo la ocupación ilegal de un edificio municipal. Desde la templanza, faltaría más. O aprovechar bien el coche oficial en Fitur, que para eso está, oiga.
Si quieren jugar un instante a predecir el futuro inmediato de Córdoba, les propongo un divertimento fácil. Busquen en nuestra web el acuerdo programático de PSOE, IU y Ganemos Córdoba . Imprímanselo y léanlo de manera detenida. A partir de ese momento, imaginen lo que está por llegar en los próximos meses, pues, el arranque de mandato que hemos tenido, si se siguen cumpliendo a rajatabla este rosario de imposiciones , les va a saber a ligero aperitivo. Todo ello sin contar que finalmente pueda cuajar en el Gobierno central un acuerdo entre los socialistas de Pedro Sánchez y la tribu podemita del jefe Pablo Iglesias. Un perfecto banco de pruebas: Cordobalab, ciudad de los experimentos .
Desgraciadamente, los hechos, los documentos y los datos configuran la ciudad que hoy tenemos y la imagen que estamos ofreciendo , sin que haya que condimentar nada. Por mucho que alambicadas puestas en escena nos quieran dibujar un onírico plano irreal de una ciudad que ya ha sido contada de la misma manera infinidad de veces sin moverse de donde estaba y sin dar cuerpo a tanta promesa infructuosa que huele a naftalina cada vez que sale del armario.